En materia de tecnología e innovación, el gobierno del presidente Iván Duque (al que ya solo le quedan 6 meses por delante) se destacó por tener la ambición de convertir a Colombia en el Silicon Valley de América Latina. La alusión a la región en California (Estados Unidos) en donde nacieron compañías como HP, Google o Facebook tiene un problema de dimensión, ya que no se pueden comparar 3 ciudades con un país entero. Pero la manera como se mueve el mercado actual apunta a que hay áreas en las que esta visión se está convirtiendo en una realidad.
Incluso frente a pesos pesados como Brasil, México o Argentina, Colombia ha logrado perfilarse como un país atractivo para empresas internacionales que llegan a la región, o regionales que buscan expandirse a otros países. Más allá de las respuestas trilladas, la realidad es que Colombia tiene talento, cultura y habilidades prácticas que la destacan por encima de otros.
Desde Japón hasta Colombia
Hiroki Inagawa, CEO y fundador de la firma de consultoría digital Monstarlab, decidió abrir sus primeras oficinas regionales en Colombia por razones prácticas y por su visión al futuro. La ubicación geográfica de Colombia significa que puede expandirse hacia el norte a países de Centroamérica, así como al sur de América Latina a países como Brasil y Argentina.
Sin embargo, Inagawa también considera que Colombia sería un buen complemento para sus operaciones en Estados Unidos: “Decidimos abrir una oficina en Colombia para aumentar nuestras capacidades, especialmente para el mercado norteamericano”, afirmó. Monstarlab tiene sus oficinas principales en Tokyo (Japón), y Colombia representa nuevas oportunidades de negocio y de talento.
Si bien Japón es un país que trae a la mente imágenes de alta tecnología, lo cierto es que algunas de sus compañías tradicionales más importantes se han resistido al cambio que trae la digitalización. Inagawa entiende que, en la era digital, la diversidad es una ventaja competitiva.
Andrea Giraldo, directora de la sección People & Culture (Gente y Cultura) de Monstarlab en Colombia, también resaltó que el ambiente político en el país es tranquilo frente a otros de la región. La continuidad de proyectos por parte de entidades como Minciencias o el MinTIC ha significado que Colombia ahora cuenta no solamente con las ganas, sino también con el talento para fomentar el crecimiento del sector tecnológico. “Esto nos ha permitido convertirnos en una región que tiene todas las habilidades blandes y duras”, afirmó.
Aunque pueda sonar contradictorio, el relativamente alto nivel de inglés del sector profesional y de software ha convertido a Colombia en un país atractivo para la subcontratación en materias tecnológicas. Esto contrasta con los bajos niveles de inglés que tiene el país en general, y que muestran de nuevo una brecha en la enseñanza de este como segunda lengua. Este buen manejo en niveles de educación superior ha facilitado la expansión de compañías como Teleperformance y Amazon con centros de servicios en Colombia para clientes en Estados Unidos, mientras que otras como la argentina Globant apuestan por el talento en desarrollo de software en Colombia.
Se estima que Bogotá cuenta con más del 70% del talento bilingüe del país, lo cual hace a la ciudad más competitiva y le permite competir con las principales capitales latinoamericanas por la atracción de proyectos de inversión.
Isabella Muñoz, directora ejecutiva de Invest in Bogota
Un gigante regional con proyección internacional
Globant es hoy por hoy una de las compañías de tecnología con más contrataciones en el país: alrededor de 5.000. En su papel como desarrolladora de software, Globant trabaja con clientes internacionales como Google o EA, la casa matriz del popular videojuego Fifa. Para Juan Manuel Mogollón, director ejecutivo de Globant Colombia, el hecho de saber inglés ha significado comunicación directa, abierta y más ágil con clientes en otros países.
Esto, además, también se ha visto impulsado por el movimiento hacia la virtualidad. “No importa donde vivas en Colombia, desde que tengas la conexión y el talento”, explica Mogollón. Globant tiene oficinas en Bogotá, Medellín, Cali y recientemente Barranquilla. Si bien históricamente el talento se ha enfocado en ciudades como Medellín y Bogotá, Mogollón recalca que parte de la solución a la búsqueda de talento está en apoyar otras regiones del país.
Según Isabella Muñoz, directora ejecutiva de Invest in Bogotá, más del 60 % de la industria TI actual está ubicada en Bogotá, acompañada igualmente por gran parte del talento especializado. Si bien es normal que la capital del país esté centralizada, existe un vacío importante en regiones como la del Pacífico y el Caribe. “Al final del día, cada empresa del sector TIC que llega al país, sin importar a qué ciudad lo hace, aporta al crecimiento de esta industria y abre la puerta a nuevas compañías que ven en Colombia un destino con potencial para el desarrollo de sus operaciones”, explica Muñoz.
Bucaramanga, Popayán y Pereira se han perfilado como semilleros de talento para empresas, impulsadas en su mayoría por iniciativas como Bucaranaranja, una plataforma de apoyo a la industria creativa (o naranja) en el departamento de Santander. El modelo de impulsar la innovación es un éxito comprobado gracias a casos como el de Ruta N en Medellín, y el reto ahora está en buscar que esto se extienda a más regiones del país.
Según Mogollón, los clientes internacionales de Globant siempre están satisfechos con el desarrollo de software en Colombia, lo que según él también demuestra el gran potencial que tiene el país en materia de software. “Tenemos colombianos viviendo en Colombia pero haciendo software importantísimo, por ejemplo, para el videojuego Fifa, o componentes para aplicaciones de Disney”, afirma.
Sin embargo, tanto Inagawa como Mogollón son enfáticos en decir que es fundamental pensar a futuro y en las necesidades de la industria.
Los retos que quedan
Desde hace años, cifras de Fedesoft y del gobierno aseguran que existe una brecha de alrededor de 60.000 talentos en el ámbito TI. De entrada, este es un problema que augura un crecimiento más modesto en años futuros, especialmente si además de la demanda internacional también tenemos en cuenta el fomento de emprendimientos locales.
Según Invest in Bogotá, la capital del país se ha popularizado por elementos como los porcentajes estables de inflación frente a otras capitales de la región. Adicional a esto, en este apartado la presencia de marcas relevantes a nivel internacional ha reforzado el ecosistema tecnológico del país. Hechos como que Oracle está en proceso de construir su centro de datos, o el lanzamiento del nuevo centro de distribución de Mercado Libre no solamente son logros empresariales, sino también del país y del sector.
Para emprendimientos o multinacionales, la decisión es más fácil cuando, además de las ventajas como el bilingüismo y la posición geográfica, pueden encontrar o fomentar el crecimiento de aliados importantes. La alemana DHL Supply Chain, por ejemplo, ha logrado importar exitosamente procesos de automatización e Inteligencia Artificial que no existían en el país.
Parte de lo que ha hecho exitoso su proyecto en Colombia es que puede depender de una industria tecnológica robusta y un ecosistema que funciona como combustible para sus ambiciones en el país. Este tipo de ambiciones no puede subsistir si la brecha de talento sigue aumentando y si no existen incentivos por parte de gobiernos locales o regionales.
Tal vez más importante aún, es necesario que el talento colombiano entienda que sus proyecciones son de nivel mundial, y que en el terreno de tecnología el potencial es gigante. En palabras de Juan Manuel Mogollón: “Esto es aspiracional, esto nos ayuda a pensar en grande y lo vemos con hechos”.
Imagen principal: Leandro Loureiro (Unsplash).