Un equipo de investigadores del Instituto Avanzado de Ciencia y Tecnología de Corea del Sur (KAIST, por sus siglas en inglés) presentó recientemente el primer robot piloto humanoide del mundo: Pibot.
Pibot combina los avances de la Inteligencia Artificial (IA) con su diseño humanoide, lo cual lo diferencia de los modelos precedentes, y representa un avance significativo en lo que tiene que ver con sistemas de vuelo automatizados.
Una de las características del nuevo robot es que puede controlar sus brazos y dedos para manejar los instrumentos de vuelo, incluso con fuertes vibraciones en un avión. Además, su memoria es de tal capacidad, que puede memorizar todas las cartas de navegación, una tarea imposible para los pilotos humanos.
“Pibot es un robot humanoide que puede pilotar un avión igual que un piloto humano, manipulando todos los mandos de la cabina, que está diseñada para humanos”, explicó a Euronews Next David Shim, profesor asociado de ingeniería eléctrica del KAIST.
Cabe destacar que uno de los elementos fundamentales, y que ha potencializado las capacidades de Pibot, es su integración con ChatGPT. Gracias a esta tecnología el robot puede almacenar las cartas de navegación aeronáutica de la Autoridad de Aviación Mundial Jeppesen y ejecutar, sin margen de error, el Manual de Referencia Rápida (QRH), que contiene procedimientos críticos para emergencias y condiciones anormales de vuelo.
Estas habilidades, imposibles incluso para los pilotos más experimentados, permiten a Pibot ejecutar vuelos sin errores y responder rápidamente a diversos escenarios, superando a sus contrapartes humanas. Además, con 160 cm de altura y 65 kg de peso, puede sentarse en cualquier cabina de avión.
Del piloto automático a Pibot
Hasta ahora los pilotos automáticos, muy comunes en los aviones, eran programas informáticos que ejecutaban acciones preprogramadas para optimizar la labor de los pilotos. Sin embargo, Pibot es el primer piloto humanoide con extremidades capaces de manipular los instrumentos de vuelo.
Según el KAIST, una de las muchas ventajas del nuevo robot es que puede adaptarse a distintas cabinas y sistemas de vuelo de diferentes tipos de aeronaves, sin necesidad de modificar el avión.
Todo lo anterior demuestra que Pibot representa un verdadero salto tecnológico en materia de automatización de vuelos. En 2016, el Sistema de Automatización en la Cabina de Pilotos (ALIAS) de DARPA introdujo una colaboración entre humanos y pilotos para realizar maniobras básicas en vuelo. ALIAS aterrizó con éxito un Boeing 737 mediante simulación, pero con ayuda humana.
Posteriormente se avanzó con el sistema Common Aircraft Retrofit for Novel Autonomous Control (CARNAC) desarrollado por RE2 Robotics, que en 2019 permitió un primer vuelo de prueba de 2 horas usando un robot predecesor de PIBOT.
Hasta ahora el Pibot ha sido probado exitosamente en un simulador de vuelo. La gran pregunta es si los millones de usuarios de las aerolíneas comerciales le confiarían su vida en un vuelo real.
En un futuro próximo, los investigadores prevén realizar una prueba del mundo real a bordo de un avión ligero. De acuerdo a los científicos coreanos, las aplicaciones de Pibot van más allá de la aviación, ya que podría ser utilizado en vehículos, automóviles y camiones militares.
Imagen principal: KAIST