Ser artista es una actividad que ha pasado por todo tipo de imaginarios sociales, pero hoy en día es probablemente una de las épocas en las que más se está comenzando a apoyar, de manera organizada, desde lo público y lo privado. Además, ante el terror que existe ante el desarrollo tecnológico, el pensamiento creativo, las humanidades, el arte y todo lo que ellos saquen de nosotros como humanos (aquello único e irreemplazable), son las características que más se deben potenciar. Hoy es posible ser aristas independiente.
Es por esto que nos encontramos frente a emprendimientos de todo tipo relacionados con el arte, y puntualmente enfocados en los artistas independientes. Hay para crear, colaborar, visibilizar, vender, intercambiar y mucho más.
Este es un buen momento para el arte colombiano: el mercado nacional crece, se diversifica, experimenta y a la vez se internacionaliza. En 2018 se vendieron 538.000 obras de arte, la cifra más alta desde 1945, y solo en subastas se recaudaron más de 15.480 millones de dólares, según informó Dinero.
Y musicalmente hablando, somos uno de los países de Latinoamérica que más talento exportan y que contribuyen al crecimiento de la industria musical. Según el IFPI Global Music Report, en 2018 América Latina creció un 16,8%; si bien hubo una caída en los ingresos por discos físicos (-37,8%), el streaming tuvo un crecimiento del 39,3%. Brasil es el mercado más grande de la región (38,5%), le siguen Chile (16,3%), México (14,7%) y Colombia con el 9,0%.
Esta industria, con su etiqueta de independiente, también se mueve. Una de las mayores dolencias de los integrantes este gremio a través del tiempo ha sido la necesidad de contar con una disquera, un sello, un editor o básicamente, estar metido en ‘la rosca’ para lograr que sus creaciones trasciendan. Si algo permite Internet es tener la posibilidad de entrar en contacto con todos. Depende de los artistas independientes, de la gestión de cada uno, de conocer los recursos y explotar las herramientas, alcanzar el éxito (que no necesariamente tiene que ser económico; cada artista busca algo diferente).
Aquí compartimos con ustedes algunos ejemplos de iniciativas que pueden ser útiles para artistas independientes:
Artrade
Las obras de arte no son exclusivas de museos o galerías. Como ya hemos visto, los muros también son lienzos vivos y el comercio electrónico también se enfoca en este mercado. Este es el caso de Artrade.co, una galería de arte virtual para que los artistas puedan vender sus obras directamente.
Detrás de esta startup (que ya completa 5 años) están dos colombianas: Sylvia Barrero y Ana Lemoine Latorre. Inició con 10 artistas y un poco más de 50 obras; hoy ya son 200 artistas con más de 1.500 obras disponibles en la plataforma, la cual se queda con el 35% del valor de la obra. Es decir, que el 65% queda en manos del artista.
“Hemos venido triplicando ventas del 2018 al 2019 y esperamos cerrar el año con una facturación de 450.000.000 de pesos”, dice Sylvia Barrero, cofundadora de la plataforma digital.
La participación femenina en Artrade es mayoría. Actualmente hay 111 artistas mujeres y 99 son hombres. El 90% de los artistas es de Colombia, principalmente de Bogotá, pero resaltan que tienen participación de todo el país y hay un 10% internacional. De hecho, uno de los planes de la galería virtual es abrir catálogo en otros países de la región.
Tu Toque
¿Quién conoce un grupo de mariachis para la fiesta de 15? ¿Quién sabe de artistas de rock para un evento ambientalista? Este tipo de solicitudes de recomendaciones son frecuentes en redes sociales y aquí hay una plataforma para eso, para los músicos y artistas independientes que ofrecen presentaciones en vivo para familias, empresas u otro tipo de eventos. Tutoque.co tiene un catálogo de artistas bastante variado, con calificación y reseñas de los usuarios, y además cuenta con el apoyo del Instituto Distrital de las Artes de Bogotá (Idartes).
Es un marketplace para músicos, creado por un equipo que lleva años en la industria. “Podemos asegurarte que entendemos el negocio de la música en vivo. Sabemos lo difícil que puede ser para clientes conseguir al músico ideal y que para los músicos llegar a clientes puede resultar complejo y costoso“.
Artfinder
Es un marketplace de arte que ya funciona en más de 100 países del mundo, incluidos Colombia, Venezuela, Perú, Chile, Argentina y México; tiene registrados más de 10 mil artistas y mensualmente se agregan unas 15.000 obras de arte para la venta.
La idea detrás de Artfinder es que los artistas independientes puedan ganarse la vida haciendo lo que aman, y por otro lado que las personas puedan encontrar y comprar obras de arte sin importar su gusto o presupuesto. “Tanto si eres amante del arte como si eres curioso, te conectamos directamente con artistas independientes de todo el mundo. Cada pieza es original, firmada por el artista y viene con su propia historia“.
La empresa nació en 2013 y desde 2017 usa Inteligencia Artificial para ofrecer obras, según el historial de búsquedas y compras a cada usuario.
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Amuse
Es sin duda una de las plataformas de streaming que más están dando de qué hablar entre músicos, porque se está posicionando entre artistas emergentes como la alternativa para distribuir su música en tiendas globales, para facilitar el reconocimientos que por factores de ubicación o dinero no han podido trascender; pero algo realmente importante y valorado es que les permite a los músicos conservar sus derechos de composición y tener 100% de las regalías a través de la aplicación. Recordemos que plataformas como Spotify o Apple Music cobran a los agregadores (músicos) por tener allí su música.
El negocio de Amuse no está en la distribución de la música, por eso los artistas pueden quedarse con el 100% de sus regalías. Lo que la empresa busca es identificar los artistas con potencial (con análisis de datos) para firmar contratos y seguir trabajando con algunos de ellos en proyectos futuros. Sí, algo así como firmar con una disquera, solo que la distribución económica es más favorable para los artistas, además de que, como se mencionó, conservan sus derechos de composición.
La aplicación nació en Suecia en 2015 y se le conoce como el primer sello discográfico móvil. En 2018 logró que los artistas independientes generaran más de 643 millones de dólares, 35% más que en 2017.
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La galería online
Esta es otra opción colombiana creada para difundir y vender obras de arte, a través de una plataforma online 24/7. En la Lagaleriaonline.co hay un comité curatorial conformado por Francisca Miramón y Viviana Mayor, quienes cuentan con 10 años de experiencia en temas de curaduría, producción y gestión de exposiciones de arte.
A diferencia de otras opciones, La Galería Online nació como eso, una galería en un espacio físico que dio el paso al entorno digital. Actualmente hay 31 artistas que ofrecen sus obras de arte, entre las que se encuentran opciones de dibujo, escultura, pintura, fotografía, collage, obra gráfica e ilustración.
Fullnota
Es un emprendimiento que nació en 2013 y que pasó por proceso de aceleración con Wayra, con el objetivo de apoyar a los artistas independientes. Su creador, Melkis Obispo, es profesos de música, ha tenido bandas y conoce a la perfección las vicisitudes de ser músico independiente.
Este no es un marketplace. Fullnota es una plataforma en la que los artistas y usuarios pueden acceder a datos y reportes sobre el desempeño de la música. Allí pueden desarrollar estrategias digitales y crear campañas de promoción inteligentes, que finalmente es uno de los problemas de los músicos. Crean, pero no saben cómo venderla o hacerla llegar a donde quieren. Les enseñan a sobre análisis de reportes de ventas, segmentación según reportes y estilo de música, creación de anuncios ganadores y reportes de promoción.
Aquí la idea es que los músicos independientes accedan a información que desconocen, que sepan interpretarla, analizar los datos, para luego crear estrategias que les permitan llegar a nuevas audiencias.Con el plan gratuito pueden acceder a 27 mercados virtuales y con el plan de pago tienen acceso a más datos, así como a cursos en línea. Hay 3 planes: de 327, 587 y 1.587 dólares, con diferentes características.
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Imagen principal: collage creado con fotos tomadas de Freepik.
