El futuro del trabajo en 2025 está marcado por transformaciones sin precedentes, impulsadas por la aceleración tecnológica, cambios demográficos y dinámicas económicas globales. Según el Foro Económico Mundial, se estima que se crearán 170 millones de nuevos empleos para ese año, destacando profesiones ligadas a la transición verde, la tecnología y los cuidados. La Inteligencia Artificial (IA), el Big Data y la ciberseguridad serán motores clave, al igual que habilidades humanas como la creatividad y la resiliencia, esenciales en un entorno cada vez más digitalizado.
Organizaciones como Gartner señalan que el futuro del trabajo no solo dependerá de avances tecnológicos, como la IA y la automatización, sino también de la capacidad de las empresas para crear experiencias laborales centradas en las personas.
Desafíos como la soledad, la inclusión y el activismo laboral serán determinantes, mientras que tecnologías como los bots gestores y la tecnología Nudge reconfiguran las dinámicas organizacionales. Estos cambios exigen una adaptación ética y estratégica, donde el equilibrio entre innovación y bienestar laboral será crucial.
En este contexto, el reporte ‘Futuro del Trabajo 2025’ del Foro Económico Mundial subraya la importancia de que gobiernos, empresas e individuos colaboren para garantizar una transición productiva hacia nuevas formas de empleo. Programas de reentrenamiento, inclusión de grupos marginados y estrategias centradas en la sostenibilidad y la ética serán esenciales para capitalizar las oportunidades del futuro del trabajo, asegurando que estas transformaciones sean tanto positivas como equitativas.
1. Un mercado laboral dinámico, pero desigual
En Colombia, según la Encuesta de Expectativas de Empleo de ManpowerGroup, la Tendencia Neta de Empleo ajustada estacionalmente en Colombia es del 20 % para el primer trimestre de 2025. Aunque representa una ligera disminución frente al trimestre anterior, refleja un entorno laboral estable.
Los sectores con mayor demanda son Tecnologías de la Información (TI) y Manufactura, con las empresas de TI reportando un crecimiento de 7 puntos porcentuales en sus perspectivas de contratación respecto al trimestre anterior. Por regiones, Amazonas lidera con un 44 % en intención de contratación, seguido del Pacífico (40 %) y el Caribe (38 %).
Además, el 66 % de las empresas en Colombia aseguran haber alcanzado la igualdad de género, un salto significativo respecto al 28 % del año pasado. Sin embargo, aún queda trabajo por hacer en términos de equidad salarial, aunque el 60% de las organizaciones están avanzando en esta dirección.
2. El liderazgo centrado en las personas y la integración tecnológica
Manpower Group destaca que el liderazgo será clave en el futuro del trabajo 2025 estará marcado por un enfoque más humano. Las habilidades como la empatía, la inteligencia emocional y la capacidad de inspirar confianza serán esenciales. Al mismo tiempo, los líderes deberán equilibrar la tecnología con el talento humano, promoviendo equipos autogestionados y estructuras ágiles.
Gartner complementa esta visión señalando que la tecnología Nudge (Nudgetech) está reduciendo la brecha de comunicación, y los empleados empiezan a preferir bots en lugar de jefes, en busca de mayor equidad. Sin embargo, advierte que las organizaciones obsesionadas con la IA podrían comprometer su productividad en lugar de mejorarla.
En general la tecnología continuará guiando las tendencias laborales. Deloitte agrega que los avances en áreas como la robótica, IA, sensores y datos están revolucionando las dinámicas laborales. Estos desarrollos están rediseñando la mayoría de los trabajos, destacando habilidades esencialmente humanas como la creatividad, la empatía y la resolución de problemas complejos.
Esto genera un entorno donde el aprendizaje continuo y el desarrollo de nuevas habilidades son esenciales para la empleabilidad, lo que plantea retos significativos en la manera en que las empresas capacitan a sus empleados y en cómo las universidades adaptan sus modelos educativos para preparar a las nuevas generaciones.
Estos avances tecnológicos no solo aumentan la productividad, sino que ofrecen oportunidades para reinventar las formas de trabajo, mejorando la resolución de problemas, ampliando la oferta de servicios, y creando ambientes laborales que inspiran mayor satisfacción y pasión en los empleados.
3. Desafíos y oportunidades de la Inteligencia Artificial (IA)
La IA y el análisis de datos seguirán redefiniendo los modelos de negocio y la fuerza laboral. Según el Foro Económico Mundial, casi el 40 % de las habilidades requeridas para los trabajos actuales cambiarán para 2030, y el 63 % de los empleadores identifica el desfase de cualificaciones como su mayor obstáculo.
Se espera un aumento en la demanda de habilidades tecnológicas, como IA, big data y ciberseguridad, pero las capacidades humanas como la resiliencia, la flexibilidad y el pensamiento creativo seguirán siendo clave. Además, un 77 % de los empleadores planea mejorar las capacidades de sus trabajadores, mientras que el 41% considera reducir sus plantillas debido a la automatización.
4. Cambios económicos, demográficos y geoeconómicos
El Foro Económico Mundial identifica factores clave que impulsan la transformación del mercado laboral:
- Presiones económicas: Aunque la inflación global ha disminuido, se espera que el aumento del coste de vida desplace 6 millones de empleos a nivel mundial para 2030.
- Cambios demográficos: El envejecimiento de la población en países de altos ingresos impulsa la demanda de empleos sanitarios, mientras que el crecimiento de poblaciones jóvenes en regiones de bajos ingresos fomenta la demanda en educación.
- Tensiones geopolíticas: Estas están llevando a estrategias de deslocalización y relocalización, incrementando la necesidad de habilidades en ciberseguridad y comercio internacional.
Por otro lado, Deloitte coincide en el elemento demográfico pues, de acuerdo con la consultora, los cambios en la composición de la fuerza laboral global están moldeando las oportunidades laborales.
El aumento en la expectativa de vida ha llevado a muchas personas a extender sus carreras más allá de la edad tradicional de retiro, mientras que las economías en desarrollo aportan un flujo constante de trabajadores jóvenes al mercado global. A su vez, la inclusión de grupos anteriormente marginados está diversificando la fuerza laboral, y el auge del trabajo independiente bajo esquemas tipo “gig” está facilitado por plataformas digitales que conectan talento con proyectos específicos, redefiniendo la manera de trabajar.
5. El activismo de los empleados y la IA responsable
Gartner resalta que el activismo de los empleados está impulsando la adopción de normas éticas para la Inteligencia Artificial. Las organizaciones deben redefinir los límites entre fraude y juego limpio en el uso de esta tecnología, mientras trabajan para garantizar la inclusión y la pertenencia de sus colaboradores.
Por otro lado, el Foro Económico Mundial reitera que la soledad de los empleados se está convirtiendo en un riesgo empresarial que afecta tanto la productividad como el bienestar general.
6. Sectores en transformación y nuevas oportunidades
De aquí a 2030, el Foro Económico Mundial prevé un incremento neto de 78 millones de empleos a nivel global. Las mayores oportunidades estarán en sectores esenciales como la salud y la educación, así como en áreas tecnológicas impulsadas por la IA y la energía renovable. Por otro lado, trabajos administrativos y creativos, como el diseño gráfico, enfrentarán una mayor disrupción.
7. Hacia un mercado laboral resiliente
La iniciativa Reskilling Revolution del Foro Económico Mundial busca mejorar las capacidades de mil millones de personas para 2030, abordando el desfase de cualificaciones. Esto requiere un esfuerzo conjunto entre gobiernos, empresas y trabajadores para construir una fuerza laboral global preparada para los desafíos futuros.
En este contexto, las organizaciones que logren equilibrar la tecnología con el enfoque humano, priorizar la sostenibilidad y promover la inclusión tendrán mayores probabilidades de prosperar en un mercado en constante evolución.
La tendencia hacia la resilencia también es destacada por Deloitte, asegura que clave para afrontar estos cambios reside en desarrollar estrategias integrales que equilibren el impacto de estas fuerzas.
Los gobiernos deben replantear políticas educativas y de empleo; las empresas, priorizar la capacitación y la flexibilidad; y los individuos, invertir en la actualización constante de sus habilidades para mantenerse relevantes en un entorno laboral en constante evolución. Explica que solo así se garantizará una transición fluida y productiva hacia el futuro del trabajo en 2025.
