Aunque muchas personas tienen claro desde muy temprano el camino que deben seguir en la vida, para otras es más difícil tomar decisiones trascendentales, entre ellas qué estudiar. Y si bien el gusto por una disciplina específica forma parte de las variables, los contextos de cada territorio pueden matizar la decisión final.
La formación es un tema decisivo y en la búsqueda de la carrera perfecta se encuentran muchas alternativas, algunas de más peso que otras, otras más convenientes que otras para analizar. Por lo general, los estudios e investigaciones que hablan sobre tendencias en educación son muy generales y pueden distar de las tendencia locales, pero sirven como referencia al momento de escoger el camino.
Por ejemplo, según The Economist, para ganar más dinero se deben estudiar carreras relacionadas con matemáticas, física, ciencias de la computación, negocios y economía. De otro lado, el Banco Económico Mundial nos dice en su reporte sobre el ‘Futuro de los trabajos’ que en el caso de América Latina y el Caribe, las oportunidades emergentes están encaminadas hacia el desarrollo y análisis de software y aplicaciones, y ciencia, entre otras disciplinas.
Las empresas buscan talento, es su prioridad por encima incluso del costo. Es decir que se enfocan más en encontrar las personas que realmente sepan hacer lo que necesitan, antes que en el dinero que les costará. Esto nos dice a grandes rasgos que hay que formarse, actualizarse, porque la necesidad de talento es grande y esta será la principal tendencia siempre: estudiar.
Las motivaciones para estudiar pueden ser varias, como conseguir un trabajo o crear empresa propia. Las formas de estudiar también son variadas: se puede hacer de manera presencial, virtual o parcial; hay cursos de larga, mediana y corta duración, así como todo tipo de metodologías.
Las posibilidades de financiación son múltiples: existen becas, programas desde organizaciones públicas y privadas e iniciativas en general que buscan motivar y formar para suplir las necesidades del mercado; las mismas instituciones educativas trabajan en alianzas e incluso están las que ofrecen planes para pagar después.
Platzi es uno de los jugadores más destacados en educación de la actualidad; a través de su tradicional ‘Platzi Live’, Freddy Vega, CEO y cofundador de la institución, reúne algunas de las principales tendencias de educación, basadas en el talento que más se está necesitando en el mundo. Y precisamente por estos indicadores es que plataformas como la suya, y otras, están creando todo tipo de cursos para satisfacer esa demanda:
- Inteligencia Artificial.
- Robótica y automatización de procesos.
- Científicos de datos (Data Scientist).
- Ingenieros Full Stack.
- SRE (Site Reliability Engineering).
- Customer success, equipos para lograr el éxito, que requieren habilidades blandas.
- SDR (Sales Development Representatives).
- Ciberseguridad.
- Backend Developer.
- Chief Revenue Officer.
“El porcentaje de crecimiento anual de los salarios en tecnología, en Latinoamérica es de 16% año tras año. Ninguna otra industria, excepto la tecnología, tiene esto”: Freddy Vega.
Tendencias de educación a la medida para Colombia: programación
Para escoger la carrera adecuada en el contexto presente del mercado colombiano hay que tener varias cosas en cuenta. Por un lado, la tasa de desempleo, y por el otro, las necesidades del mercado laboral.
En cuanto al primer punto, nos dicen los datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), que la tasa de desempleo en noviembre de 2019 fue de 9,3%; en cuanto al segundo punto existen diferentes mediciones y percepciones. Al respecto, Pedro Mejía, country manager de Acámica en Colombia, dice: “Las empresas de tecnología, o que ya entendieron la necesidad de ‘transformarse digitalmente’, seguirán mostrando una tendencia a contratar profesionales por sus capacidades y competencias demostradas en los procesos de selección, más que por su diploma”.
[su_box title=”Acámica en Colombia” style=”default” box_color=”#EC7063″ title_color=”#FFFFFF” radius=”3″ class=””]En 2019 tuvo más de 300 estudiantes presenciales activos (entre septiembre y diciembre) y más de 100 en carreras virtuales. Abrió las carreras de Desarrollo Web Full Stack; Diseño UXUI y Data Science. Las metas para 2020 son llegar a 1.250 presenciales y 500 virtuales. Adicionalmente, lanzará la carrera de Front End Avanzado en React, en alianza con Globant, y llegará a una tercera ciudad (tiene presencia en Medellín y Bogotá).[/su_box]
Desde Medellín, por ejemplo, uno de los principales focos ha sido la creación de un ecosistema en el que se articulen diferentes sectores para fomentar el desarrollo de la ciudad. Elkin Echeverri, director de planeación y prospectiva de Ruta N, explica que desde que se creo esta entidad se han enfocado para que otras entidades den lo mejor y que la educación es parte esencial del desarrollo de la ciudad y el país: “Si no tienes talento no hay innovación, y la conexión con el sistema educativo es importante”.
Dentro de esa articulación hay más de 300 empresas del sector de la tecnología, que son precisamente las que proveen datos más aterrizados de lo que se necesita y se busca en Colombia. Echeverri asegura que de para dentro de 4 años, esas compañías van a necesitar más de 52 mil personas en áreas de tecnología. Especialmente en todo lo relacionado con programación, pues de ahí se desprenden conocimientos específicos en campos avanzados como Pyton, Java, Full-stack, Frontend y DevOps, entre otros. “Hemos traído bootcamps del mundo y estos datos vienen de la demanda”.
Esa tendencia es soportada por Holberton Colombia. Jessica Mercedes, country manager de esta institución, dice que “lo que más tiene demanda en Colombia por empresas locales e internacionales son los programadores full-stack”.
Retomando las tendencias, en Medellín específicamente, Echeverri también destaca la robótica y 3 campos esenciales en la creación del Centro para la Cuarta Revolución: Inteligencia Artificial, Internet de las Cosas y Blockchain. (Para conocer la oferta laboral dentro del sector se abrirá el portal ‘Talento Digital Medellín’ a finales de enero).
Los jóvenes serán ‘los elegidos’
¿Y quiénes van a llenar esas vacantes? Ciertamente puede ser todo tipo de personas. Sin embargo, desde Ruta N se han planteado la población juvenil como uno de los principales focos. “Debemos sacar una estrategia para ir a buscar los jóvenes que necesitamos, porque uno de los principales problemas de Colombia es el desempleo juvenil, es el segmento donde podemos encontrar estos trabajadores”, agrega Echeverri.
De acuerdo con los datos del Dane, la tasa de desempleo de la población joven fue de 17,5% entre septiembre y noviembre de 2019, que representó un aumento de 1,4 puntos porcentuales frente al mismo periodo de 2018 (16,1%).
A este problema se le suma la deserción, y es precisamente con la tecnología que organizaciones como Ruta N están presentando nuevos panoramas a los jóvenes. Una carrera tradicional toma de 4 a 5 años y, dados los entornos socioeconómicos, los jóvenes abandonan, incluso teniendo becas, según comparte Echeverri. Una de las ventajas dentro de la tecnología es que hay cursos de corta y mediana duración. “Entonces, en un año un joven ya puede estar consiguiendo un mejor trabajo. No solo se trata del futuro del trabajo, sino de las posibilidades de esos jóvenes”.
Y si se habla del cómo, hay varias formas de hacerlo, no necesariamente en un salón o frente a un computador (si son del método en línea, aquí tenemos más recomendaciones para aprender específicamente sobre programación). Como uno de los mayores retos está en la atracción de talento, hacer que la gente conozca y se interese, que no vea estos temas como algo de otros, una de las alternativas que se está usando es llevar el conocimiento directamente a los públicos y es aquí donde nacen todo tipo de alianzas con colegios, universidades y empresas.
Por su parte, retomando la conversación con Pedro Mejía (Acámica), él cree que en 2020 se verá “mayor compromiso por parte de las compañías en involucrarse en la formación de talento y en reclutar talento iniciante, tendiendo puentes entre industria y educación. Esto decanta en mayor colaboración entre empresas con bootcamps de tecnología y otras instituciones de educación ‘no formal’, para formar o recapacitar de manera ágil a su fuerza laboral, con modelos que las vinculan íntimamente y no solo para contratar talento”.
Pero siguiendo en el ‘cómo’, encontramos que no hay un solo modelo, y precisamente la variedad y flexibilidad en las ofertas es –o parece ser– lo que se destacará.
Jessica Mercedes comparte que 2020 será un año en el que se verá más educación no formal llenando la brecha enorme en el área de talento digital. Esto incluye “modelos de educación innovadores como acuerdos de ingreso compartido donde los ingresos de las instituciones dependen del éxito del estudiante. Cada vez van a existir más de estas ofertas con metodologías educativas innovadoras y modelos de financiación alternativos”.
Mejía agrega que estas maneras de estudiar serán una gran oportunidad para llegar a más personas, fuera de las grandes ciudades. “Hoy, nuestra vida acontece cada vez más online, por lo que hay una proliferación de la oferta educativa 100% ‘on line’ y ‘blended’ (mezclada). Esto permitirá democratizar y llegar a regiones apartadas con propuestas relevantes y pertinentes. Hay una gran oportunidad en educar en las regiones”.
[su_box title=”Holberton en Colombia” style=”default” box_color=”#EC7063″ title_color=”#FFFFFF” radius=”3″ class=””] En 2019 tuvo 150 estudiantes en Bogotá, 100 en Medellín y 50 en Cali, de los cuales el 83,48% fueron hombres y el 16,52 %, mujeres. En 2020 abrirán una nueva sede en Barranquilla y quieren aportar con por lo menos 600 programadores full-stack al año “como un granito de arena inicial”. La cuarta sede será en la capital del Atlántico porque “tiene una muy fuerte fuente de talento y excelentes empresas de software” incluyendo su aliada principal Koombea. Barranquilla se ha enfocado en ser sede de talento para clientes en Estados Unidos, convirtiéndose en una ciudad fuerte en cuanto exportación de servicios de software.[/su_box]
Más allá de lo técnico
Además de adquirir constantemente conocimientos sobre temas específicos de áreas STEM (ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés), hay otro capítulo que debe agregarse y es el de las habilidades blandas. Después de todo, esas características humanas y sociales son también parte de los procesos de selección.
Sobre esta variante, Mercedes agrega que “por encima de las habilidades en lenguajes de programación específica, se buscan personas que tengan fuertes habilidades blandas de comunicación, trabajo en equipo, liderazgo y que tengan la capacidad de tomar cualquier lenguaje de programación o herramienta relevante para la tarea. Ya los programadores que solo saben desarrollar en una sola herramienta y no tienen esa capacidad de autoaprendizaje reciben menos ofertas o de compensación más baja”.
La cultura hace parte de todo este proceso, no solo dentro de los estudiantes sino de las mismas soluciones de educación. Este es un momento para seguir fortaleciendo la industria y por eso Mejía habla de la importancia de la colaboración y la ‘coopetencia’, “definida como la colaboración entre competidores de negocio, en búsqueda del beneficio mutuo”, como algo fundamental para el desarrollo.
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Foto de portada:Startup Stock Photos (Pexels)