En Colombia la brecha digital tiene desigualdades. El 33 % de la población mundial, alrededor de 2.600 millones de personas, permanece desconectado de Internet en el año 2023; mientras que 5.400 millones de personas (67 %) están en línea por medio de diferentes tecnologías fijas y móviles, no obstante, atravesadas por grandes disparidades digitales entre regiones y dentro de ellas, según datos de conectividad y brecha digital presentados durante la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones (CMR-23), que se realiza en Emiratos Árabes del 20 de noviembre al 15 de diciembre.
Resulta llamativo que un evento de este tipo dure casi un mes, pero la CMR, organizada por la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), que se realiza entre cada 3 y 4 años, tiene el propósito de revisar, discutir y actualizar el Reglamento de Radiocomunicaciones de la UIT. Nada más y nada menos que el tratado internacional que regula el uso del espectro radioeléctrico y las órbitas de los satélites.
En el marco de este encuentro se presenta una serie de cifras del estado de las telecomunicaciones en el mundo para dar contexto al debate interno de la conferencia. Las cuales, a su vez, permiten hacer distintos análisis desde una perspectiva global hasta el detalle de una situación local como la colombiana.
El informe Hechos y cifras 2023 subraya que este año el 93 % de las personas que habitan países de altos ingresos utilizaron Internet, casi la cobertura universal si se tiene en cuenta que hay quienes deciden mantenerse desconectados; mientras que en los países de bajos ingresos el 27 % de la población lo hace (por lo menos una vez en los últimos 3 meses, sin importar el tipo de acceso), lo que representa una brecha digital de 66 puntos porcentuales entre regiones ricas y pobres.
En cuanto a Colombia, de acuerdo con datos de UIT y el Informe sobre el Desarrollo Mundial de las Telecomunicaciones, el 73 % de las personas usó Internet en 2021 y 2022, lo que indica que no creció el número de ciudadanos conectados a la red en ese período y que en 2022 estábamos por debajo de vecinos como Argentina (88 %), Brasil (81 %), Chile (90 %), México (76 %), Perú (75 %), Paraguay (76 %) y Uruguay (90 %), mientras que superamos a Bolivia (66 %) y Ecuador (70 %).
Cabe señalar que la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC) reporta que al segundo trimestre de 2023 los accesos a Internet móvil en el país llegaron al 79,3 % de la población; sin embargo, para el fin de esta columna se utilizaron los datos de la UIT con el propósito de comparar mediciones que utilicen los mismos parámetros.
Si nos ajustamos a la conclusión del informe que señala que el uso de Internet está “estrechamente vinculado al nivel de desarrollo de un país”, esto significa que, de unos años para acá, Colombia se está relegando frente a la región no solo en materia de conectividad sino en competitividad, a pesar de que hace una década ocupaba los primeros lugares en los listados de América Latina.
4G ayuda a cerrar la brecha digital de Colombia, ¿y 5G?
Al abordar el tipo de tecnología de acceso las disparidades se hacen mayores en el mundo. Tras el lanzamiento comercial del 5G en 2019, este ha crecido hasta alcanzar una cobertura del 40 % de la población mundial. Ahora bien, de este porcentaje, el 89 % está ubicado en países de altos ingresos.
En la región, Chile, Brasil y Uruguay llevan la delantera en el despliegue de redes 5G, mientras que las autoridades colombianas asumieron una posición prudente al frenar el proceso hacia dicha tecnología ante las dificultades financieras que atraviesan las empresas privadas del sector, responsables de más del 96% de la inversión en infraestructura de telecomunicaciones móviles en el país.
No obstante, y tras una larga espera, este 20 de diciembre se dará el primer paso hacia la quinta generación con la subasta de espectro radioeléctrico, para que en 2024 comiencen a prestar el servicio.
Espera que también se sustentó en que 4G es una tecnología robusta que aún tiene espacio para crecer en Colombia, donde representa el 87,7 % de todos los accesos a Internet móvil, mientras que 3G es el 11,1 %, según la CRC.
De hecho, el 90 % de la población mundial está cubierta por 4G que, cuando no está disponible 5G, sigue siendo una muy buena alternativa.
Sin embargo, el 55 % de aquellos sin acceso a la tecnología 4G reside en naciones con ingresos bajos. Es decir que 3G es la tecnología de banda ancha móvil predominante en los países más pobres. En contraste, el 95 % de la población en naciones con ingresos altos y medios disfruta de cobertura 4G o 5G.
Al desagregar los datos por ubicación sobresale que prácticamente todas las áreas urbanas del mundo están dentro del alcance de una red de banda ancha móvil 4G. Mientras tanto, esa cobertura comienza a disminuir en las zonas rurales: 96 % de la población tiene acceso en países de altos ingresos; 75 % en las Américas (promedio norte, centro y sur), 93 % en países de ingresos medio altos; 87 % en ingreso medio, y 17 % en los países de bajos ingresos.
Esto significa que casi todas las personas sin acceso a una red de banda ancha móvil viven en una zona rural de un país en desarrollo.
En cuanto a Colombia, no estaba disponible un dato consolidado sobre cobertura móvil de población en zonas rurales, pero la información más aproximada, proveniente del DANE, señala que para 2021 el 61,2 % de los hogares ubicados en centros poblados o rurales accedían a Internet por medio de una conexión móvil.
El país se encuentra en un punto intermedio en el escenario mundial y regional en cuanto al acceso a Internet y las habilidades TIC de sus ciudadanos, lo que deja un amplio margen para avanzar con las políticas públicas adecuadas.
No debemos olvidar que, a pesar de las condiciones geográficas excepcionalmente complejas, contamos con una infraestructura de telecomunicaciones sólida que, eso sí, debe superar la costosa barrera que representa el entorno rural del país.
Tráfico e Internet fijo
A pesar del aumento de las suscripciones a banda ancha móvil, su mayor asequibilidad y carácter democratizador para el acceso a Internet, el volumen de tráfico sobre esas redes es mucho menor al de las fijas, que representan el 83 % de la transmisión de datos en el mundo, poniendo de relieve una vez más la brecha digital que hay entre unos y otros, la cual impacta directamente en el desarrollo productivo de las sociedades.
En 2022, el tráfico promedio mensual de banda ancha fija por suscripción alcanzó los 257 gigabytes (GB) en todo el mundo; en comparación,el tráfico de banda ancha móvil por suscripción promedió 11 GB.
También hay un abismo entre regiones en el tráfico de banda ancha fija y móvil por suscripción. En la región Américas, una suscripción a banda ancha fija genera 326 GB de tráfico por mes, en comparación con 130 GB en África; mientras que en banda ancha móvil, el promedio mensual en África es de 1,9 GB, aproximadamente seis veces menos que la media mundial de 11,2 GB.
Se destaca que el promedio de descarga de datos móviles en Colombia en 2023 es de 13,2 GB en modalidad de suscripción, resultado de los bajos precios que convierten la oferta de este país en una de las más económicas del mundo para los usuarios.
En cuanto al acceso a banda ancha, este resulta prácticamente imposible en amplias zonas del mundo debido a su alto costo o, incluso, a su ausencia. Sin embargo, la tecnología de banda ancha fija es fundamental para expandir las capacidades digitales, ya que resulta imprescindible para utilizar aplicaciones de Internet que requieren un alto consumo de datos.
Las desigualdades en el acceso a conexiones fijas entre países son mayores que en el caso de la conectividad móvil, según el informe. En los países de ingresos altos hay 39 suscripciones por cada 100 habitantes, pero son casi inexistentes en los países de ingresos bajos, debido a los altos precios y la falta de infraestructura.
Acá, Colombia tiene un buen desempeño (aunque la medición es distinta), pues según la CRC de cada 100 hogares, 50,1 poseen una suscripción al servicio.
Donde el país tiene un regular desempeño es en cobertura de Fibra Óptica al Hogar (FTTC) o hasta el Edificio (FTTB). Según 5G Américas, Colombia ocupó el penúltimo puesto de la región en cuanto a hogares pasados por la red en 2022, con el 44 %, y sólo el 15% del total de suscripciones correspondió a esta tecnología, mientras que en Brasil y en México es el 45 % y 31 %, respectivamente.
Aunque el país tiene un porcentaje significativo de su población utilizando Internet, se sitúa por debajo de varios vecinos latinoamericanos en términos de penetración, así como experimenta un evidente rezago en accesos para habitantes de zonas rurales.
El desarrollo de la fibra óptica, a pesar de los proyectos llevados adelante por las empresas privadas, requiere de mayor atención del Estado para su consolidación. Aunque el gobierno ahora está enfocando sus esfuerzos hacia el desarrollo de 5G, no puede desatender a la piedra angular de todo este desarrollo, que es la fibra óptica.