Cuando se busca la palabra ‘Tinder’ en TikTok, aparecen miles de historias de usuarios que comparten sus experiencias en esta popular plataforma de citas. La mayoría de ‘storytimes’ habla del éxito que tuvieron al hacer ‘match’ con esa persona que ahora es su pareja.
Todas las historias inician con una conversación por chat y después de semanas o meses los involucrados deciden conocerse personalmente. Y pese a que la mayoría habla de ser felices y hasta haber entablado una relación con la otra persona, también hay quienes hablan de gran desilusión y de cómo los afectó ver que sus expectativas fracasaron.
Por supuesto, quienes tienen éxito tienen una motivación mucho mayor de darlo a conocer en sus redes que quienes fracasan en su búsqueda de pareja o quienes tienen experiencias negativas o hasta peligrosas.
Sin duda, las relaciones de pareja han cambiado gracias a Internet. Hoy, es común que las personas encuentren pareja o amigos a través de aplicaciones de citas o en las redes sociales. Durante la pandemia, este tipo de relacionamiento tomó fuerza, abriendo la oportunidad de ampliar su círculo social y amoroso con personas de diferentes lugares del mundo.
A pesar de que actualmente el 40 % de las personas conoce a su pareja en Internet, según un estudio realizado por la Universidad de Stanford, persisten los riesgos a la hora de entablar una relación con una persona que se conoció en el mundo virtual pero no en el físico.
Expectativa vs. realidad
Y es que a pesar de que la forma de conocerse ya no es la misma que antes, la línea que separa lo digital de lo físico es lo que marca la diferencia. Lo virtual permite que las personas despierten emociones y se satisfagan necesidades momentáneas. Sin embargo, solo cuando se tiene un contacto físico se conoce realmente a la otra persona, lo que puede llevar a la desilusión o, en el mejor de los casos, a fortalecer esas ilusiones.
“El enamoramiento a través de las relaciones virtuales ha traído consigo el consumo de otras formas de vendernos, de exhibirnos ante los demás para sentirnos atractivos y tener más oportunidad de ser elegidos. Vivimos en una competencia muy fuerte por la elección y por sentirnos reconocidos y atraídos. En parte, aunque suene fuerte, hemos mercantilizado las relaciones”, señala José Ricardo Franco, sicólogo especializado en sicología del consumidor y representante del Campo Psicología del Consumidor del Colegio Colombiano de Psicólogos (Colpsic).
Para Franco, estas tecnologías están haciendo que se cree una atracción por la otra persona basada en la perfección que permiten estas herramientas. Un enamoramiento idealizado, y en ocasiones efímero y ocasional, algo que el sociólogo Zygmunt Bauman llama el amor líquido.
Los amores líquidos, según Bauman, son esos amores que se desean, se anhelan, sienten atracción por la persona pero cuando esta se tiene al frente llega la desilusión, lo que coloquialmente es llamado como ‘expectativa vs. realidad’, un fenómeno que afecta a las personas en su forma de relacionarse y en los efectos sicológicos que deja para la sociedad.
La tendencia es lo virtual, pero con más confianza
Pese a estas consecuencias y a los cambios que ha traído socialmente la nueva manera de relacionarse a través de Internet, la tendencia es que la red es el sitio para buscar amigos o pareja. Sin embargo, también se evidencia un cambio en las preferencias de quienes la usan.
El estudio ‘Percepciones y Uso de Internet en Colombia 2022‘, realizado por .CO Internet (GoDaddy Registry) empresa que administra y promueve el dominio .CO, bajo contrato con el Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC), recogió algunas opiniones de usuarios colombianos frente a Internet y el efecto que tiene en las relaciones de pareja.
Entre las personas encuestadas, el 49 % afirma que han ingresado a páginas o aplicaciones para conocer personas. De las cuales, el 81 % afirmó que ha conocido a alguien por Internet y el 18 % dijo que no.
La confianza en la pareja también es un aspecto que se puede ver reflejado en el uso que se hace de Internet. En este sentido, el 29 % de los encuestados considera que su pareja tiene derecho a acceder a sus cuentas de Internet y redes sociales, un indicador que se reduce significativamente frente a 2021, especialmente en personas mayores de 45 años y personas de estratos 3 al 6.
Por otra parte, también llama la atención que el 52% de los encuestados considera que las nuevas tecnologías han complicado las relaciones de pareja.
“Se han percibido cambios en el nivel de confianza que tienen las parejas al permitir que tengan acceso a sus redes. Hubo una disminución de casi seis puntos porcentuales de la medición del año pasado. Es decir, hay menos confianza en permitir que la otra persona con quien convive tenga acceso a sus redes sociales”, afirma Eduardo Santoyo, gerente general de .CO Internet.
De las personas encuestadas, el 41 % afirman que ha hecho o dicho algo a su pareja a través de Internet que no haría en persona. “Internet no tiene una función distinta que ser un instrumento de comunicaciones que nos permite transmitir más rápido, pero no puede cambiar las relaciones. Lo importante es ver qué tanto dejamos que esa herramienta afecte nuestras relaciones”, aclara Eduardo Santoyo.
Inteligencia emocional dentro de las relaciones
La aplicación de citas Bumble realizó una investigación utilizando datos internos y encuestas para predecir las tendencias de citas en 2022. La encuesta se realizó a más de 8.500 usuarios en países como México, Estados Unidos, Canadá, Alemania, Francia, Reino Unido, Filipinas, India y Australia.
Entre las 5 tendencias presentadas por Bumble, se encontró que 2 de cada 3 personas afirmaron que ahora le dan prioridad a la disponibilidad emocional, mientras que el 23 % declaró que ahora ya no les preocupa tanto la apariencia personal de otras personas. Tras la pandemia, las personas más allá de buscar una pareja lo que buscan en estas plataformas es compartir con otras personas sus pasatiempos, por lo que el 43 % manifestó que planeará citas solo cuando los nuevos intereses se vean manifestados en conjunto.
Estas tendencias reflejan que las relaciones de pareja han cambiado con el tiempo y las circunstancias. Para el sicólogo José Franco, esto obedece a una doble transformación que están viviendo las sociedades actuales.
“El romance, el relacionamiento y la búsqueda del vínculo afectivo en las sociedades modernas está experimentando un doble proceso de transformación. Por un lado, las relaciones tradicionales de género están siendo redefinidas, y por el otro, las nuevas tecnologías están haciendo posible iniciar y terminar con relaciones románticas y afectivas a través de las redes”.
Frente a esta tendencia, Tinder en su celebración de los 10 años dio a conocer algunas de las conclusiones tras una década de ser la plataforma más usada en su campo. Entre ellas, esta que plataformas de citas como Tinder generan cambios socioculturales asociados a las relaciones interpersonales. Para algunos usuarios se han ensanchado, ampliando los círculos sociales y democratizando las relaciones sexoafectivas.
Pero también ha abierto la puerta a peligros como estafas y engaños. Según el FBI, en estas plataformas de citas las mafias aprovechan para encontrar víctimas que usan para trata de personas. En algunos casos las engañan con ofertas de trabajo o citas a ciegas.
La puerta abierta a la infidelidad
También se puede ver el lado contrario, las parejas que se han conocido en el mundo físico, pero que, debido a las redes sociales, han abierto la puerta a la infidelidad. Esto, conocido como ‘cushioning’, es una práctica que se da con el uso de las redes sociales y del contacto constante con otras personas a través de mensajes y manteniendo con ellas un vínculo íntimo.
Aunque no se llega a tener contacto físico con la persona, para los expertos es un tipo de infidelidad emocional. Esta práctica no solo es riesgosa para la pareja, sino para esa tercera persona que queda en un segundo plano.
“La pandemia acrecentó esta practica, la saturación, el hartazgo, el estado anímico con el confinamiento hizo que la gente buscara alternativas de vinculo emocional y sexual. Es inventar una ilusión, mantener la mente en otra parte. Las personas encontraron en las redes sociales una nueva forma de infidelidad, una infidelidad virtual, cuando se mantiene una relación con alguien de manera secreta pero lo único que hago es textear”, señala el sicólogo José Franco.
Tan es así, que hay plataformas dedicadas a la infidelidad. Gleeden es una app dedicada a las citas entre personas casadas. Según su descripción, este es un espacio para buscar una aventura extraconyugal cerca de casa o un amante a miles de kilómetros. Está pensada especialmente para las mujeres.
La tecnología y el futuro de las relaciones de pareja
Como todo en el mundo tecnológico, las relaciones virtuales van evolucionando. Consciente de los riesgos que han manifestado los usuarios, Bumble incluyó una herramienta llamada Private Detector, desarrollada con Inteligencia Artificial entrenada para detectar imágenes de desnudos y otro tipo de contenido inapropiado que sean enviadas dentro de los chats.
Esta plataforma también fue pensada para brindar una mejor experiencia para las mujeres, por lo que solo ellas pueden dar el primer paso. Su objetivo es establecer relaciones más sinceras y con las intenciones (amistad, relaciones serias, diversión…) preestablecidas de forma más clara.
Ahora bien, el mundo está dando un saltó hacia la Web3, marcada por la realidad virtual y el metaverso, por lo que en un futuro próximo las plataformas de citas se volcarán a este espacio y permitirán nuevas formas de relacionamiento.
Es bien sabido que en este mundo del metaverso se podrán simular abrazos y besos entre los usuarios, lo que sin duda cambiará las citas románticas y las relaciones en general.
Así como la tecnología ha ido evolucionando, asimismo lo hará la manera de relacionarse. Las ventajas y desventajas que trae Internet deben ser un motivo de evaluación para todos los cambios que vienen a futuro y los riesgos sociales y sicológicos que traerá.
Por eso, con estudios como el de .CO se busca además de informar crear conciencia sobre las ventajas y desventaja que ofrece Internet en las relaciones de pareja.
“Queremos crear conciencia de que Internet afecta a muchas de nuestras áreas del comportamiento. Desde esa perspectiva, animar a las personas a que conversen sobre temas relacionados con sus relaciones y, eventualmente, piensen propositivamente cómo Internet está afectando esa relación”, señala Eduardo Santoyo.
Foto de Budgeron Bach