SOSTENIBILIDAD

Economía circular: Qué es, ejemplos, ventajas de la economía verde



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La Economía Circular es una nueva forma de producir y consumir que busca minimizar residuos y maximizar la reutilización de recursos. En Colombia, gracias a la Estrategia Nacional de Economía Circular, se están dando grandes pasos hacia un futuro más sostenible y con beneficios tributarios y financiamiento.

Publicado el 18 de dic de 2024



economia circular en colombia

La Economía Circular es un modelo económico sostenible que contrasta con el modelo tradicional y líneal de tomar, producir, usar y desechar. Su objetivo principal es minimizar los residuos y reutilizar los recursos durante el mayor tiempo posible.

Esta nueva dimensión económica ya está transformando nuestro presente y tendrá un impacto significativo en nuestro futuro, gracias a la Estrategia Nacional de Economía Circular (ENEC) es una apuesta del gobierno nacional que nos invita a repensar nuestro modelo de desarrollo.

Pero, ¿qué significa exactamente la economía circular? ¿Por qué es importante tanto para el bienestar del planeta como para los ingresos corporativos? ¿Y cómo contribuyen las nuevas tecnologías a la creación de la economía circular?

La reutilización de materiales en América Latina y el Caribe (ALC) es alarmantemente baja. De acuerdo con el informe Circularity Gap Report América Latina y el Caribe, la tasa de reciclaje en la región no supera el 1 %, muy por debajo del promedio mundial del 7,2 %. Esto refleja que casi la totalidad de los recursos empleados en ALC provienen de fuentes vírgenes, mientras que solo una fracción mínima de los materiales es reciclada al final de su vida útil.

¿Qué es la economía circular?

Hoy en día, los seres humanos producen mucho más que en épocas pasadas, por lo que consumen más y generan una mayor cantidad de residuos, además de contribuir con su comportamiento al aumento del nivel de contaminación global y al calentamiento global. Todo esto sucede mientras la innovación y las nuevas tecnologías experimentan una aceleración sin igual en la historia de la humanidad y que pueden encontrar una revolución copernicana en la economía circular: una nueva forma de pensar sobre cómo diseñar nuestros productos y procesos de producción para eliminar los impactos negativos en el medio ambiente, promover el uso circular de los materiales y contribuir a la regeneración del propio sistema natural.

La economía circular, por lo tanto, significa modelo de producción y consumo aquella que implica compartir, prestar, reutilizar, reparar, reacondicionar y reciclar los materiales y productos existentes durante el mayor tiempo posible. De esta forma, se prolonga el ciclo de vida de los productos, lo que ayuda a reducir al mínimo los residuos. Una vez que el producto ha terminado su función, los materiales que lo componen se reintroducen, siempre que es posible, en el ciclo económico. De esta forma, se pueden reutilizar continuamente dentro del ciclo de producción, generando un valor adicional.

Los principios de la economía circular contrastan con el modelo económico lineal tradicional, basado en el esquema típico de «extraer, producir, usar y desechar». El modelo económico tradicional depende de la disponibilidad de grandes cantidades de materiales y energía que estén fácilmente disponibles y a un precio bajo.

En la economía circular, las energías renovables y la modularidad y versatilidad de los objetos son muy importantes, y pueden y deben utilizarse en diversos contextos para que duren el mayor tiempo posible.

Las tres palabras clave de la economía circular:

  • Recursos, entendidos como componentes del producto, que tienen un ciclo de vida más largo y un valor recuperable intrínseco.
  • Rediseñar, porque se pide a las empresas que rediseñen los procesos de producción (con intervenciones de eficiencia energética) y los productos que sean modulares y fáciles de ensamblar, fabricados con materiales reutilizables y reciclables.
  • La propiedad, ya que si en la economía lineal el producto pasa completamente al cliente, en la economía circular la propiedad del producto debe seguir siendo del fabricante, mientras que el cliente solo paga por su uso mediante mecanismos de pago por uso.

Economía circular: Una breve historia

El concepto de economía circular tiene raíces profundas. Convencionalmente, su aparición se remonta a finales de la década de 1970, cuando académicos y empresarios comenzaron a discutir el tema. Desde entonces, se han desarrollado al menos siete escuelas de pensamiento diferentes.

En Latinoamérica se consolidó la economía circular en la década de 1990, como una agenda regional, con la creación de redes y plataformas de colaboración entre países, empresas y academia. Se realizaron importantes eventos y publicaciones que visibilizaron el tema.

Luego en la década de 1999 se hicieron los primeros acercamientos a la economía circular en la región, a través de iniciativas aisladas de algunas empresas y organizaciones no gubernamentales, enfocadas principalmente en la gestión de residuos sólidos.

Posteriormente, en los 2000, se intensificó el interés por la economía circular, impulsado por la creciente preocupación por el medio ambiente y la escasez de recursos. Surgieron las primeras políticas públicas y programas de promoción en algunos países, como Chile y Brasil.

2010: La Fundación Ellen MacArthur

La británica Ellen MacArthur impulsó y difundió la economía circular en Europa. Tras batir el récord mundial de circunnavegar el globo en solitario en 2005, interrumpió su carrera a los 33 años para dedicarse a tiempo completo a la lucha por el medio ambiente. En 2010 la Fundación Ellen MacArthur creó una empresa sin fines de lucro que trabaja con empresas e instituciones educativas para acelerar la transición a la economía circular.

2015: El paquete de la Comisión Europea

El 2 de diciembre de 2015, la Comisión Europea adoptó un ambicioso paquete para ayudar a acelerar la transición de Europa a una economía circular, impulsar la competitividad global, promover el crecimiento económico sostenible y crear nuevos puestos de trabajo.

El plan de acción define 54 medidas para «cerrar el círculo» del ciclo de vida de los productos: desde la producción y el consumo hasta la gestión de residuos y el mercado de materias primas secundarias. Además, identifica cinco sectores prioritarios para acelerar la transición a lo largo de su cadena de valor (plásticos, residuos de alimentos, materias primas esenciales, construcción y demolición, biomasa y materiales biológicos). El plan hace especial hincapié en la creación de una base sólida sobre la que puedan prosperar la inversión y la innovación.

Las 54 acciones previstas en el plan se han implementado o están en proceso de implementación. El objetivo de las normas es tener un efecto práctico y concreto en la vida de los ciudadanos europeos. Por ejemplo, la medida exige que los países miembros reciclen al menos el 70 % de los residuos municipales y el 80% de los residuos de envases, y prohíbe arrojar los residuos biodegradables y reciclables a los vertederos.

En Latinoamérica, en 2015, con la adopción de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) por parte de las Naciones Unidas, los países de Latinoamérica comenzaron a priorizar la economía circular en sus políticas nacionales, destacándose el ODS 12 sobre consumo y producción responsables.

En 2018, Colombia marcó un avance significativo al ser el primer país de la región en lanzar su Estrategia Nacional de Economía Circular, un plan integral diseñado para promover prácticas sostenibles en sectores como la industria, la agricultura y los residuos sólidos. Este modelo se centró en cerrar ciclos de materiales, agua y energía para reducir el impacto ambiental y mejorar la competitividad.

2019: El Pacto Verde Europeo

Partiendo de la premisa de que el cambio climático y la degradación ambiental son una enorme amenaza para Europa y el mundo, el 11 de diciembre de 2019, la Comisión Europea presentó la comunicación sobre el Pacto Verde Europeo. Se trata de una nueva estrategia de crecimiento destinada a «transformar la UE en una sociedad climáticamente neutra, justa y próspera, con una economía moderna, eficiente en el uso de los recursos y competitiva».

Los líderes de la UE reafirmaron su compromiso de desempeñar un papel de liderazgo en la lucha mundial contra el cambio climático durante la reunión del Consejo Europeo de diciembre de 2019, en la que aprobaron el objetivo de neutralidad climática para 2050.

Hitos históricos de la economía circular en Colombia

  • 2016: Se publica la Política Nacional de Gestión Integral de Residuos Sólidos, que sienta las bases para la transición hacia una economía circular en el país.
  • 2018: Se lanza la Estrategia Nacional de Economía Circular, un documento marco que define las líneas de acción y metas para promover la circularidad en todos los sectores de la economía.
  • 2019: Se implementa la Responsabilidad Extendida del Productor (REP) para algunos productos, lo que obliga a los fabricantes a gestionar los residuos generados por sus productos al final de su vida útil. También en 2019, el respaldo del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), congregó a países como Chile, México, y Colombia para fomentar la cooperación regional en esta materia.
  • 2020-presente: Se han desarrollado múltiples iniciativas a nivel local y regional, como la creación de parques industriales ecoeficientes, la promoción de la agricultura circular y el fomento de la innovación en materiales y productos circulares. En 2021, Colombia avanzó aún más con la publicación del CONPES 4021, que estableció la hoja de ruta hacia una economía circular para 2030, priorizando sectores estratégicos y metas claras como la reducción de residuos y el incremento en la reutilización de materiales. Este liderazgo inspiró a otros países de la región, consolidando a Latinoamérica como un actor clave en la transición hacia modelos sostenibles.

Economía circular: Las ventajas para el planeta

Para comprender la importancia de la economía circular, primero debemos examinar algunos de los problemas más urgentes a los que se enfrenta la humanidad en esta era. Una de las cuestiones importantes es, sin duda, el sobrecalentamiento de la atmósfera provocado por el CO2 emitido principalmente para la producción de energía, la actividad industrial y el transporte. En concreto, según el estudio del IPCC (Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático) de octubre de 2018, tenemos unos 12 años para reducir las emisiones de CO2 en un 50 % y unos 30 años para eliminarlas por completo. De lo contrario, algunos de los efectos que ya se están produciendo se amplificarán, con el devastador impacto de sequías, incendios e inundaciones. Estos eventos ya causaron daños por valor de 320 000 millones de dólares en 2017.

Economía circular: Ventajas para las empresas

Las empresas que incursionan en la economía circular obtienen una serie de ventajas competitivas y sostenibles. Según estudios de diversos sectores, estas compañías experimentan un aumento en su eficiencia operativa al reducir costos asociados a la adquisición de materias primas y la gestión de residuos.

Además, fortalecen su reputación y fidelización de clientes al demostrar un compromiso con la sostenibilidad. La innovación se ve impulsada, generando nuevos productos y servicios circulares que abren puertas a nuevos mercados. A largo plazo, estas empresas contribuyen a la reducción de su huella ambiental, mejorando su resiliencia ante la escasez de recursos y las fluctuaciones del mercado. En resumen, la economía circular no solo beneficia al planeta, sino que también representa una oportunidad de crecimiento y diferenciación para las empresas en un mundo cada vez más consciente del impacto ambiental.

Después de todo, hoy en día los aspectos puramente financieros ya no son suficientes para la evaluación holística de una empresa. También es importante verificar su desempeño con respecto a criterios ESG específicos.

Qué es ESG

ESG son las siglas de Environmental, Social and Governance (medio ambiente, social y gobernanza), un concepto que ahora se ha establecido en el sector financiero como base para juzgar la sostenibilidad de las inversiones. La integración de los criterios ESG puede mejorar el perfil de riesgo/rentabilidad de las carteras.

El presidente y director ejecutivo de Blackrock, la mayor empresa de inversiones del mundo, incluso ha hecho hincapié en el papel crucial de los criterios de sostenibilidad en la economía. Laurence D. Fink Nel afirma que las cuestiones ambientales y sociales serán cada vez más importantes para la valoración de una empresa.

A medida que más inversores reconozcan que el riesgo climático es un riesgo de inversión. Veremos una profunda revaluación del riesgo y del valor de los activos. Estamos al borde de una importante reasignación de capital. Como fideicomisario, la responsabilidad es ayudar a los clientes a afrontar esta transición. Además, a medida que aumente el impacto de la sostenibilidad en la rentabilidad de las inversiones, creemos que, en el futuro, constituirán la inversiones sostenibles base más sólida para las carteras de clientes“, compartió D. Fink Nel.

La economía circular en Colombia

La Estrategia Nacional de Economía Circular (ENEC) es una iniciativa del gobierno colombiano que promueve un cambio de paradigma hacia un modelo de desarrollo basado en la eficiencia en el uso de recursos, el respeto por la capacidad de recuperación de los ecosistemas y la adopción de prácticas de reutilización de materiales, agua y energía. Basada en la consigna “producir conservando y conservar produciendo”, esta estrategia busca maximizar el valor agregado de los recursos a través de la innovación tecnológica, la colaboración y nuevos modelos de negocio sostenibles.

La ENEC prioriza seis flujos clave: materiales industriales y productos de consumo masivo, envases y empaques, biomasa, energía, agua, y materiales de construcción. Para implementar este modelo, establece cinco herramientas principales: la Responsabilidad Extendida del Productor (REP), nuevos modelos de negocio, parques industriales eco-eficientes, ciudades sostenibles y cadenas de valor sostenibles.

Entre los avances más destacados están la construcción de un Sistema de Información de Economía Circular (SIEC), el fortalecimiento de políticas públicas con enfoque circular, la promoción de incentivos para la transformación industrial y el fomento de la cooperación internacional para adoptar mejores prácticas.

En Colombia, uno de los casos más destacados es el de Cemex, que implementó un modelo de coprocesamiento de residuos en su producción de cemento. Esto permitió reducir en un 30 % el uso de combustibles fósiles, transformando desechos industriales y municipales en energía. Adicionalmente, iniciativas como ReciclApp han fomentado el reciclaje inclusivo al conectar recicladores informales con empresas y comunidades, mejorando los ingresos de estas familias y optimizando la gestión de residuos.

Por otro lado, Bogotá busca liderar la transición hacia una economía circular en sectores clave como el textil, la alimentación y la construcción. A través de iniciativas como Red Moda Circular, Manos Reparadoras y la Ventanilla de Negocios Verdes, la ciudad busca transformar los residuos en recursos valiosos y fortalecer las comunidades. La meta es reducir la presión sobre el relleno sanitario Doña Juana y promover prácticas más sostenibles. Con estas acciones, Bogotá no solo protege el medio ambiente, sino que también impulsa el desarrollo económico y social, generando nuevas oportunidades para emprendedores y comunidades. La Secretaría de Ambiente, a través de la Ventanilla Distrital de Negocios Verdes, juega un papel fundamental en este proceso, apoyando a las empresas que adoptan prácticas sostenibles.

Por su parte la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) compartió experiencias y alianzas estratégicas, posicionándose como referente regional en la materia. Enfatizó la urgencia de adoptar modelos de economía circular para enfrentar los desafíos ambientales derivados del consumo excesivo. El director de la CAR alertó sobre la disminución de la circularidad en Colombia y la necesidad de transformar las prácticas de consumo tanto en industrias como en hogares.

Adicionalmente, la CAR presentó su Plan de Acción Cuatrienal, que prioriza proyectos de economía circular, especialmente en el manejo del agua, y promueve la creación de negocios verdes. La entidad invita a todos los actores a unirse a esta iniciativa para mitigar los impactos ambientales y garantizar la sostenibilidad del departamento.

Algunos casos de éxito de economía circular en Colombia incluyen:

  • Sistema de aprovechamiento energético y material de residuos orgánicos en Tamesis, Antioquia: Este proyecto ha demostrado la viabilidad de transformar residuos orgánicos en energía y abono orgánico, generando beneficios ambientales y económicos para la comunidad.
  • Programa de Reciclaje de Aceite Vegetal Usado (PRAVU): Este programa ha logrado recolectar y reciclar grandes cantidades de aceite vegetal usado, evitando su vertido en alcantarillas y su impacto negativo en el medio ambiente.
  • Parques industriales ecoeficientes: Diversos parques industriales en Colombia han implementado prácticas circulares, como la gestión eficiente de energía y agua, la reducción de residuos y la promoción de la economía circular entre sus empresas asociadas.

En Latinoamérica, Chile lidera con la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP), implementada en 2016, que obligó a empresas a hacerse cargo de la recolección y reciclaje de ciertos productos, como envases y baterías. Esto ha reducido significativamente los desechos que llegan a los rellenos sanitarios y ha fomentado la innovación en empaques sostenibles. Por su parte, en Brasil, la empresa Braskem ha desarrollado bioplásticos a partir de caña de azúcar, que han reducido las emisiones de CO₂ en hasta un 70% en comparación con plásticos tradicionales.

Beneficios tributarios para la economía circular

Colombia ha implementado una serie de beneficios tributarios para incentivar la adopción de prácticas de economía circular y promover inversiones en proyectos sostenibles. Estos incentivos buscan reducir los costos asociados a estas iniciativas y hacerlas más atractivas para las empresas.

  • Descuento en el impuesto sobre la renta: Las empresas que inviertan en proyectos que generen beneficios ambientales como la reducción del consumo de agua, la disminución de emisiones o la mejora en la gestión de residuos, pueden acceder a un descuento en el impuesto sobre la renta.
  • Exclusión del IVA: La compra de equipos y maquinaria destinados a proyectos de economía circular, como sistemas de reciclaje, tratamiento de aguas residuales o generación de energía renovable, puede estar exenta del Impuesto al Valor Agregado (IVA).
  • Deducción de renta: Las inversiones en proyectos de eficiencia energética y energías renovables también pueden ser deducibles del impuesto sobre la renta.

Tipo de proyectos son elegibles para beneficios tributarios en economía circular.

Para acceder a estos beneficios tributarios, es necesario cumplir con ciertos requisitos y presentar la documentación correspondiente ante las autoridades tributarias. Es recomendable consultar con un contador o asesor tributario para conocer los requisitos específicos y los trámites a seguir en cada caso.

Los proyectos que pueden acceder a estos beneficios suelen estar relacionados con:

  • Gestión de residuos: Reciclaje, compostaje, tratamiento de residuos peligrosos, etc.
  • Eficiencia energética: Reducción del consumo de energía en procesos productivos.
  • Energías renovables: Generación de energía a partir de fuentes renovables como solar, eólica, hidroeléctrica, etc.
  • Uso eficiente del agua: Reducción del consumo de agua y tratamiento de aguas residuales.

Financiación de la economía circular

En Colombia existen diversas fuentes de financiación específicas para proyectos y empresas enfocadas en la economía circular, como por ejemplo:

  1. Bancolombia: Ha destinado más de 600.000 millones de pesos para impulsar iniciativas de economía circular en el país. Estas inversiones buscan promover el aprovechamiento de residuos y la implementación de modelos de negocio sostenibles.
  2. BidLab: El laboratorio de innovación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) financia proyectos que mejoran el procesamiento de plásticos de ingeniería, con el objetivo de aumentar la recuperación y reciclaje de materiales en Colombia.
  3. Asobancaria: La Asociación Bancaria y de Entidades Financieras de Colombia ha desarrollado planes de acción sostenible para guiar a las instituciones financieras en la inclusión de la economía circular en sus estrategias de financiamiento.
  4. GIZ: La Agencia de Cooperación Alemana apoya la introducción de mecanismos de financiamiento innovadores basados en resultados para iniciativas de economía circular en Colombia.

Por lado del Gobierno, aunque no hay una cifra exacta y consolidada sobre el total invertido por el gobierno nacional, sí existen diversas fuentes de financiamiento y programas específicos para apoyar este tipo de iniciativas.

  • Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible: A través de diferentes convocatorias y programas, este ministerio ofrece financiamiento para proyectos que promuevan la gestión integral de residuos sólidos, la eficiencia energética, el uso sostenible de los recursos naturales y la implementación de modelos de producción y consumo sostenibles.
  • Corporaciones Autónomas Regionales (CARs): Cada CAR tiene sus propios programas y convocatorias para financiar proyectos ambientales, incluyendo aquellos relacionados con la economía circular.
  • Bancos de desarrollo: El Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial, entre otros, ofrecen líneas de crédito y financiamiento para proyectos de economía circular en Colombia.
  • Sector privado: Empresas privadas y fundaciones también están invirtiendo en proyectos de economía circular, a través de sus propias iniciativas o en colaboración con el sector público.

El pasado 27 de septiembre de 2024, Colombia presentó un portafolio de inversión por 40.000 millones de dólares, destinado a impulsar la transición energética y la adaptación al cambio climático. Según el Ministerio de Ambiente, esta iniciativa busca financiar proyectos clave como el ecoturismo, la transición justa hacia energías limpias, y la conservación y restauración de ecosistemas.

Startups colombianas de economía circular

Colombia ha visto nacer un ecosistema de startups innovadoras que están liderando la transición hacia la economía circular. Estas empresas están desarrollando soluciones creativas y sostenibles para abordar los desafíos ambientales y económicos del país.

Una de las líneas de acción más destacadas en el día a día es la tendencia del ruso de la ropa. Aquí han surgido ventas informales a través de redes sociales, iniciativas de reciclaje, organizaciones dedicadas a la gestión textil o aplicaciones como GoTrendier.

  • Alfe Aseo: Esta startup se enfoca en la reutilización de envases de productos de limpieza. A través de un sistema de recarga y reutilización, Alfe Aseo reduce significativamente la generación de residuos plásticos y promueve el consumo responsable.
  • BATx: Esta empresa se dedica a la maximización del ciclo de vida de las baterías de litio para movilidad eléctrica. BATx ofrece soluciones de recolección, almacenamiento y reconversión de baterías, promoviendo la economía circular en el sector de la movilidad eléctrica.
  • Toynovo: Toynovo se enfoca en la venta y alquiler de juguetes reparados y reciclados, extendiendo la vida útil de los juguetes y reduciendo la generación de residuos.
  • Selva Nevada: Esta startup desarrolla productos de higiene personal a partir de recursos naturales y biodegradables. Elabora alimentos, como helados y pulpas de fruta, utilizando insumos naturales obtenidos de forma sostenible a través de planes de aprovechamiento forestal y sistemas agroforestales. Este enfoque contribuye a la regeneración de la naturaleza, apoyando la biodiversidad y promoviendo la salud de los ecosistemas
  • La Cortesana: Fundada por Carolina Gaitán Montoya, es el primer coworking textil digital del mundo que conecta talleres, proveedores, fábricas y marcas textiles. La plataforma busca formalizar y hacer más justa la industria textil, eliminando intermediarios y permitiendo que los confeccionistas reciban una remuneración adecuada por su trabajo. Esta iniciativa promueve la sostenibilidad y la equidad en el sector textil colombiano.
  • ClickGreen: Esta startup potencia emprendimientos de reciclaje al recaudar fondos de inversores y utilizarlos para apoyar compañías enfocadas en soluciones sostenibles. ClickGreen actúa como un puente entre inversores y proyectos de reciclaje, facilitando el crecimiento de iniciativas que promueven la economía circular en Colombia.
  • Muta: Especializada en el reciclaje, Muta ha logrado reincorporar millones de kilogramos de residuos a la economía circular. En 2023, la empresa reportó ventas significativas y se prepara para expandirse a otros mercados, demostrando el potencial de las soluciones de reciclaje en la economía circular.
  • SiembraCo: Fundada por Yuly Galindo y su esposo Camilo Ramos, esta plataforma permite a los usuarios financiar cultivos a través de internet, conectando directamente a consumidores con agricultores. SiembraCo trabaja con miles de familias campesinas, proporcionándoles remuneración justa, apoyo técnico y financiación sin interés, promoviendo el comercio justo y la sostenibilidad en el sector agrícola.

La economía circular es una oportunidad para que Colombia se posicione como líder en sostenibilidad en América Latina. Al adoptar prácticas circulares, las empresas pueden reducir costos, mejorar su imagen y contribuir a un futuro más próspero para todas las personas.

Fuente: Economyup.it, Network Digital360

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