Miguel McAllister es un nombre que no necesita presentación. Fue cofundador de Domicilios.com y cofundador y CEO de Merqueo. Así como Rappi existe para los domicilios rápidos y antojos pequeños, Merqueo se especializa en órdenes más grandes como el mercado del mes.
McAllister es ingeniero de sistemas de la Universidad de los Andes, pero en 2015 decidió crear Domicilios.com, una empresa que el año pasado se asoció con la brasilera iFood para crear un gigante de los domicilios en Colombia y la región. Merqueo nació en gran medida por el “caos” que, según el emprendedor, representaba hacer el mercado cada mes y estar constantemente buscando y comparando precios.
El camino no ha sido fácil ya que emprender en tecnología en un país como Colombia no era una tarea sencilla. Sin embargo, temple y conocimiento han llevado a McAllister a crear dos de los emprendimientos más exitosos en el país.
Con motivo del estreno de Shark Tank Colombia, en donde McAllister justamente será uno de los tiburones evaluando a los participantes, nos sentamos a hablar con el emprendedor sobre su historia, los retos y mensajes para los nuevos emprendedores.
¿Qué expectativas tiene de la nueva temporada de Shark Tank Colombia?
Lo más importante de Shark Tank Colombia es que es una franquicia mundialmente reconocida. Obviamente me siento súper honrado de ser parte de esto, y creo que la razón por la que me gusta estar aquí es porque a mí me tocó emprender cuando emprender no era sexy.
Emprender era –o esta era la visión de la gente– ‘Oye ese tipo no fue suficiente para conseguir un buen trabajo, entonces se puso a emprender’. Era más como el mercachifle más que más que una carrera. A través de los años ese concepto ha cambiado mucho al punto que hoy ser emprendedor se ve bien.
Me acuerdo cuando se tenía cero respeto por el rol, entonces me gusta cualquier cosa que ayude a engrandecer al emprendedor, a motivar a la gente a emprender, a volver esto una carrera formal, o tal vez no formal pero que la gente sienta que esto es una carrera.
Esto no es como que un día me dio por ser emprendedor. Uno es emprendedor o no es emprendedor, soy abogado o no soy abogado, soy arquitecto o no soy arquitecto.
Es muy importante entender que hay varios niveles, es una carrera larga y a medida que pasa uno se vuelve mejor emprendedor. Eso me gusta eso. Me gusta que Shark Tank es un programa que le ayuda a la gente a entender cómo son las dinámicas de conseguir inversión.
Creo que prepara la gente. Hoy gracias a Shark Tank uno puede ver cómo son las interacciones desde que uno hace un pitch hasta las preguntas, la inversión, como se negocia y qué le interesa a un inversionista.
También es entender que no todo el mundo es un buen inversionista para uno. Hay gente que no entiende lo que uno hace, hay gente que sí, hay gente que me puede ayudar así como hay gente que no.
Creo que todo eso ayuda a generar una mejor cultura de emprendimiento, a difundir conocimiento y a engrandecer al emprendedor. Entonces creo que para mí esa es la razón por la que me gusta participar.
Los emprendimientos tecnológicos tienen el doble reto. No solamente crea un buen producto, sino también de enfrentarse al cambio cultural hacia la digitalización. ¿Cómo fue para usted esta experiencia en el caso de Merqueo?
Siempre la gente le va a decir que lo que hacemos no tiene sentido, que lo que hacemos es muy difícil, qué lo que hacemos seguramente es muy riesgoso. Eso es lo es lo normal. Yo lo que le digo a la gente es que no oiga nada de eso. Aleje de su vida, o por lo menos de estas conversaciones, a toda la gente que trate de decirle que no haga las cosas, a toda la gente que los asuste.
Dele paso a gente que lo motive, que lo entienda, que lo apoye. Eso es lo más importante y lo más difícil. Yo le llamo a eso cuidar las ganas. Como me gusta explicarlo es que uno puede tener todo el tiempo del mundo, o más bien mucho tiempo y puede tener mucha plata, pero no puede pararse de la cama, ¿por qué?, porque no tiene ganas de hacer nada.
Entonces cuando uno tiene ganas de hacer algo, lo que uno tiene que hacer es cuidar esas ganas y cuidarlas significa alejarse de todo aquel que lo va a tratar de empujar para atrás, a decirle que no haga las cosas.
Y cuidar esas ganas y fortalecerlas significa rodearse de gente que crea en uno y que lo apoye. Llega un punto en el que ese pequeño fuego, que son las ganas, se vuelve tan grande que simplemente ya no se puede apagar. En ese punto es cuando la gente dice, uy, sí, la vaina sí funcionaba, tenía razón, está chévere.
Lo segundo es que emprender, más que para gente inteligente, es para gente tonta y arriesgada, o tal vez tonta e ingenua. Entre más tonto e ingenuo, es más fácil ser emprendedor. Ser inteligente, analítico, eso no forma a los mejores emprendedores, porque la gente analiza mucho y termina haciendo nada. Creo que uno tiene que ser más pasional, más ingenuo, para poder dar ese salto y lograr cosas.
Si uno mira en la historia de la humanidad, la mayoría de la gente que ha logrado cosas increíbles no tenía ninguna experiencia, sino que tenía ganas, tenía pasión. Todos podemos aprender, todos tenemos un cerebro y hay un montón de material, pero los que lograron las cosas nunca fueron ni los pesimistas, ni los más educados, ni los que más sabían de algo.
Siempre es el loco, el que está dispuesto a aprender, el apasionado y el que está dispuesto a tomar un riesgo porque es demasiado ingenuo.
En el pasado la mayoría de plataformas en Colombia eran extranjeras. Para una plataforma como Merqueo, ¿cómo ha sido enfrentarse también a la idiosincrasia y cultura del país?
Uno siempre tiene que construir soluciones para su contexto. Lo más importante es entender a quién le estoy hablando, a quien le voy a solucionar la vida, cuál es el problema que yo soluciono. Hay que hablar mucho con las personas, con los clientes potenciales y entender qué tan grande es la oportunidad.
Yo pienso que son más los casos donde toda la humanidad se parece y tiene los mismos problemas, que los casos que son ultra específicos a un país. La realidad es que por más de que usemos mucho efectivo en Colombia, la solución no es hacer soluciones para mejorar el uso del efectivo. La idea es erradicar eso y volverlo dinero digital y todo lo que conlleva con la bancarización.
Obviamente cuando uno está ejecutando las ideas, este contexto en el que nos movemos pues hace que se tengan que desarrollar de una u otra forma. En e-Commerce, por ejemplo, este tema de recibir efectivo es impensable en los Estados Unidos o en Inglaterra. Pero si uno se va a la India o Latinoamérica, pues toca hacerlo.
Son como pequeñas adaptaciones que hacemos de algunos modelos para poder darle acceso a la gente, mientras que la gente sigue, por ejemplo, bancarizándose o adoptando más las tendencias de comportamiento global. Lo que yo diría es que siempre deberíamos tratar de construir las cosas que el mundo está llevando a los países desarrollados, pero simplemente con modificaciones para el momento en el que está el país y la cultura de cada uno.
Yo soy de los que ven más oportunidades en tratar de hacer que el país avance y se vuelva más parecido a los países que están un poco más avanzados, que en tratar de seguir desarrollando cosas que son muy diferenciales culturalmente.
¿Cómo ve el emprendimiento en Colombia y más específicamente el de base tecnológica?
Creo que va muy bien. Todas las métricas, todas las gráficas, muestran que cada vez está mejor. Es una categoría que aumenta muchísimo en cantidad de inversión, en cantidad de compañías, startups y cantidad de personas que trabajan en la industria, lo cual es un éxito enorme.
Esto pasa simplemente por los emprendedores y por la tendencia global. Esto no se lo debemos a ningún gobierno ni a ninguna persona, es un tema de simplemente un montón de gente tratando de construir cosas y apasionados por un sector en particular.
Esto me gusta mucho porque los trabajos que genera esta industria son puestos súper bien remunerados, súper técnicos, súper especializados y súper valiosos para el mercado global. Es una industria que puede generarle muchísima riqueza a nuestros países.
Lo único que tenemos que hacer es pensar en grande y tratar de construir cosas grandes desde aquí. Tenemos talento y acceso a capital, lo que faltan son ideas y ejecución. No creo que nos haga falta ayuda de nadie, ni nada político, ni programas de nada. Es más un mindset, es el chip de creer que se puede, de acercarse como emprendedores, de unirse en comunidad y ayudarse para sacar proyectos adelante.
¿Algún mensaje final para los emprendedores que no estén seguros de dar ese gran salto?
Si uno tiene las ganas de hacer algo y una idea, uno tiene que salir y tratar de hacerlo. Eso no quiere decir renunciar al trabajo y tampoco salirse de la Universidad, tampoco quiere decir botar todo por la borda. Lo que quiere decir es dedíquele si quiere una hora al día, al principio, luego 2, luego 3. El día es largo, tiene 24 horas y la gente pues se espera que se trabajen 8, entonces hay suficiente tiempo para sacar su proyecto adelante.
Limitante simplemente mental. Es mejor trabajar una hora que cero, es mejor trabajar 2 horas que 1, pero lo importante es hacer algo y lo único que necesitas las ganas. Si se tienen las ganas y la motivación, ese es el mejor momento para empezar, nada más.
Y sin hacer tonterías, sin botar todo por la borda antes de que la cosa tenga forma. Uno tiene que trabajar en los proyectos hasta que se vuelven tan grandes que da una tranquilidad enorme tomar las decisiones difíciles.
Imagen principal: Shark Tank Colombia
