Recientemente Impacto TIC realizó la segunda entrega de su serie ‘Estado y Futuro TIC 2025-2026’, un evento centrado en “Colombia y su futuro con la Inteligencia Artificial“. Una jornada que reunió a líderes de los sectores público y privado para analizar la brecha existente entre las políticas de IA del país y su adopción práctica en las empresas y la sociedad.
El consenso fue que, si bien Colombia tiene un marco de gobernanza sólido, el principal desafío ahora es el talento humano capaz de conectar la tecnología con las necesidades reales del negocio.
La consultora TIC Viviana Banegas Barrero abrió la jornada explicando la situación actual. Destacó que Colombia ocupa el cuarto lugar en el Índice Latinoamericano de Inteligencia Artificial, principalmente por su robusta gobernanza. Sin embargo, esta fortaleza en la política contrasta con la adopción real, ya que solo el 18 % de las personas en el país reportan haber utilizado servicios de Inteligencia Artificial Generativa, lo que evidencia un rezago en la apropiación.
Uno de los principales frenos para cerrar esta brecha, según Banegas, es la falta de talento especializado, pero no del tipo técnico. “Nos faltan los traductores”, afirmó. Explicó que el país no solo necesita ingenieros de Machine Learning, sino gerentes, abogados o expertos en logística que entiendan los problemas de sus respectivos sectores y puedan “traducirlos” en casos de uso viables para la Inteligencia Artificial.
A este desafío de talento se suman otros obstáculos significativos como la “parálisis del piloto”, refiriéndose a la incapacidad de las organizaciones para escalar los experimentos de IA y llevarlos a una transformación real del núcleo del negocio. Para entender este fenómeno el Live TIC “Colombia y su futuro con la inteligencia artificial” trató la IA desde dos paneles: uno del sector privado y otro desde la óptica gubernamental.
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Empresas avanzan en la industrialización de la IA
Pese a los retos existentes, el primer panel, de líderes empresariales, demostró que la industrialización de la IA en Colombia ya es una realidad en compañías que han superado la fase de experimentación. Juan Camilo Polanía, gerente de soluciones de tecnología en Seguros Sura, y Erik Sánchez, gerente de Analítica e IA de Carvajal, compartieron sus avances al respecto.
Polanía señaló que Sura adoptó una postura de “adoptante temprano“, lo que les ha permitido tener hoy más de 360 agentes de IA productivos. Estos agentes asisten en procesos clave, como análisis médicos y jurídicos:
“Hace tres años empezamos a ver el potencial que tenía la Inteligencia Artificial Generativa, lo que nos llevó rápidamente a tener una discusión al más alto nivel directivo que fijara cuál iba a ser la postura de Sura frente a la adopción de estas capacidades. En ese momento, Sura declaró que íbamos a tener una postura de adopción temprana con tres variables que iban como a regular esa mirada que son: Uno, la responsabilidad. Dos, la eficiencia y tres la responsabilidad”.
Por su parte, Sánchez detalló que en Carvajal la IA se enfoca en la eficiencia operativa, el servicio al cliente y el uso de visión artificial para el control de calidad en manufactura: “La primera decisión que tomamos fue que no nos quedáramos experimentando y que industrializáramos la Inteligencia Artificial para el uso y la apropiación dentro de Carvajal. Y eso es lo que hemos hecho hasta el momento, llevarlo por todos los sectores, por todos los grupos, y por cada uno de los procesos”.
El rol humano y el talento
Un punto de consenso fundamental entre los panelistas del sector privado fue la gobernanza y el control humano. Tanto Sura como Carvajal tienen políticas estrictas donde la IA potencia o asesora, pero nunca toma decisiones críticas de forma autónoma. Esta gobernanza también se aplica a la gestión del Shadow IT; Sura, por ejemplo, optó por no prohibir herramientas como ChatGPT, sino por entregar herramientas corporativas seguras a sus 20.000 empleados.
Por su parte, Jony Alejandro Arias, architecture lead para Colombia – Ecuador de Escala 24×7, afirmó: “El tema de la Inteligencia Artificial no reemplaza la inteligencia humana, es una extensión. Siempre tiene que haber esa guía del ser humano dentro de ese loop de la interacción con la IAl. Y definitivamente no creo que sea bueno dejarle tomar decisiones de temas críticos, por ejemplo, que tenga que ver con personas, con clientes y con temas de la reputación de una organización”.
Los retos y avances en el sector público
La segunda parte del Live TIC “Colombia y su futuro con la Inteligencia Artificial” se centró en la visión pública y territorial de la Inteligencia Artificial (IA) y su rol en la transformación de los servicios al ciudadano. Los panelistas incluyeron a Sandra Milena Urrutia, Secretaria TIC, Gobernación de Boyacá; Tatiana Insignares, asesora de Transformación Digital, Secretaría TIC, Gobernación de Bolívar; Santiago Amador, CEO de Ágata (Bogotá) y William Valencia, Subdirector de DATIC, Cali.
El debate abordó el propósito de la IA en el Estado, sus retos de implementación y las estrategias necesarias para garantizar la transparencia. Los ponentes establecieron una clara diferencia entre el uso de la IA en los sectores público y privado. Mientras el sector privado se enfoca en eficiencia y nuevos negocios, el consenso fue que el Estado debe centrarse en los derechos, la equidad y el impacto social.
Santiago Amador introdujo el concepto de “servidor público aumentado”, explicando que la IA debe potenciar las capacidades de los funcionarios y no suplantarlos. Esto implica usar la tecnología para manejar tareas repetitivas y permitir que el Estado preste servicios las 24 horas.
Desde las regiones, se reforzó esta visión social. Sandra Urrutia señaló que el propósito de la IA en Boyacá es “incluir y no para excluir“, haciendo de la pedagogía un eje central. William Valencia indicó que el desafío en Cali es “crear valor público con los datos”, manteniendo siempre al ciudadano en el centro de los servicios. Tatiana Insignares, de Bolívar, describió la meta como la construcción de un “gobierno inteligente”, lo cual exige, ante todo, un cambio en la cultura organizacional.
Los retos superan la tecnología: Datos, interoperabilidad y cultura
A pesar de la disponibilidad de herramientas tecnológicas, los panelistas advirtieron que los mayores obstáculos no son técnicos. Santiago Amador afirmó que la tecnología es solo la “última milla” de la transformación. Subrayó que los retos más difíciles son la falta de una “cultura de datos” en las entidades, donde la información a menudo sigue registrándose en planillas de papel.
Otros desafíos críticos mencionados fueron la falta de gobernanza de datos, la necesidad de mejorar el back office y la carencia de interoperabilidad real entre los sistemas de diferentes secretarías.
Para superar estos retos, las regiones expusieron proyectos concretos. Boyacá está invirtiendo en infraestructura con la construcción de grandes centros de IA en Chiquinquirá y Tunja. Además, se enfoca en la formación de talento mediante hackathons y bootcamps especializados para formar capacidades en funcionarios y estudiantes. Cali, por su parte, avanza en su meta de ser una alcaldía data-driven, utilizando modelos predictivos para detectar brotes de dengue, alertas de fenómenos climáticos y riesgos de homicidios.
La Gobernación de Bolívar destacó su enfoque de “más territorio, menos escritorio“. Entre sus iniciativas se encuentra Geo Bolívar, una plataforma para la interoperabilidad de datos geolocalizados, y el proyecto Mompox Inteligente, que usa infraestructura IoT para monitorear en tiempo real los niveles y la contaminación del río Magdalena.
Frente al temor ciudadano de que la IA tome decisiones sin supervisión, los expertos fueron enfáticos en que las decisiones finales siempre las toman los funcionarios. Para asegurar la transparencia, Cali promociona su portal Pa’ Que Veas, donde los ciudadanos pueden auditar las inversiones. Amador sugirió medidas técnicas como la anonimización de datos y la “interoperabilidad no centralizada“, un modelo donde los datos no se copian, sino que se consultan en su fuente original para proteger la privacidad.
Al cierre del panel, se discutió qué necesita el sector público del privado para acelerar esta transformación. Las solicitudes incluyeron mayor inversión en recursos económicos y un enfoque específico en fortalecer la seguridad digital. Asimismo, se destacó la necesidad de crear infraestructuras públicas digitales robustas, como una plataforma nacional de identidad electrónica, y de activar la cuádruple hélice (gobierno, academia, empresa y ciudadanía).
Si quiere ver el Live TIC, lo invitamos a verlo en la cabecera de este artículo o en nuestro canal de Youtube.







