La Transformación Digital que ha recorrido América Latina tiene innumerables beneficios para las empresas, pero también retos. El principal de ellos, el talento humano. ¿Cómo estamos en la región y para dónde vamos? Algunas palabras con Marcelo Salari de Kibernum.
En 2021, un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) encontró que el 64% de los directivos, de entidades públicas latinoamericanas, se quejaron por las dificultades para encontrar un talento en proyectos tecnológicos. Y no están solos.
Las empresas privadas de la región afrontan los mismos dilemas y solo en Colombia, por tomar un ejemplo, existe un déficit de 80 mil desarrolladores de software, para 2022, una cifra que podría llegar a 112 mil, en 2025.
Y más allá de América Latina, es una problemática global lo que genera dos escenarios: por una parte un problema para las empresas que buscan atraer y retener un talento escaso y por otro claro, una oportunidad de negocios para empresas capaces de concentrar y administrar ese talento. Kibernum es una de ellas.
Con presencia en Estados Unidos, Colombia, Chile y recientemente Perú, se trata de un emprendimiento al que se le quedaron pequeñas las fronteras y debió cruzarlas para buscar nuevos horizontes, nos recuerda Marcelo Solari, CEO de la empresa, en su reciente visita a Colombia. Por ello, Kibernum ha seguido una estrategia de expansión regional que la llevó a crecer un 300% (en Estados Unidos) en el 2022.
“ La principal fuente de talento TIC para los servicios en Estados Unidos va a ser desde Colombia”.
Marcelo Solari, CEO de Kibernum
Al preguntarle por los desafíos para atraer el talento tecnológico la respuesta es casi inmediata: flexibilidad. “Hay que darles la posibilidad de trabajar desde su casa. No imponer la presencialidad siete días a la semana, como era tradicional, eso ya no existe”.
“Cuando reclutamos gente, de toda parte del mundo, nos preguntan tres cosas: ¿cuánto van a ganar?, ¿cuál es el tipo de proyecto? y la ambición del proyecto y lo entretenido del mismo proyecto. Además si hay la posibilidad de trabajar 100% remoto. Y es la posibilidad, porque algunos no tienen problemas eventualmente de ir, pero sí es una condición eso limita mucho las cosas”.
Otros retos en el horizonte
La alta demanda del talento en tecnología ha generado retos que van más allá del dinero. Aunque claro, es un hecho que cada día se paga más por el talento calificado del sector TIC, pero actualmente la retención del talento es una iniciativa que requiere de una estrategia de múltiples frentes donde la compensación es solo un componente.
Por ello, varios analistas coinciden en inculcar una sentido de “propósito”. A diferencia de otras épocas es importante involucrar la curiosidad y la pasión de los empleados, si se quiere tenerlos a largo plazo. Pero los retos van más allá.
“Voy a a repetir algo que he escuchado 1 millón de veces y es que el 95% de las cosas que se está haciendo en el mundo de recursos humanos no sirve, al menos para este mundo TIC. Cuando se habla de retención de talento, de gestión del desempeño, de clima laboral, de descripción de cargo, nada de eso sirve. Todo es obsoleto” afirma Diego Araya Pironi, country manager de Kibernum para Colombia.
Ante este fenómeno, Araya agrega que han desarrollado planes de carrera a corto plazo que incluyen “la posibilidad de que las personas incluso se tomen seis meses, o un año sabático. Porque no siempre la flexibilidad del desarrollo de una carrera profesional va a tener que ver con ir subiendo con la lógica de las generaciones antiguas de ir estudiando escalonadamente”.
Planes para Colombia
A diferencia de los centros de soporte de India, China y resto de Asia, América Latina comparte los mismos horarios, facilitando la respuesta inmediata y paralela a cualquier inconveniente o equipo de desarrollo proveniente del coloso norteamericano.
Irónicamente, la escasez global de talento tecnológico se presenta como una oportunidad para América Latina. Empezando por la alta demanda de la primera economía global, la estadounidense, que además de su eterno apetito por recursos agradece una ventaja de la región: la misma zona horaria.
Gracias a esto Marcelo Solari promete que “La principal fuente de talento TIC para los servicios en Estados Unidos va a ser desde Colombia. Además aquí hay más cercanía, comparado con la región”.
Para lograr esto y otros objetivos de la empresa, KIbernum planea duplicar su equipo humano en Colombia atacando diferentes verticales del mercado, además de regiones como Medellín. También y gracias a varias alianzas regionales quieren buscar multinacionales de origen chileno, con presencia en Colombia, para reforzar sus operaciones.
Pero tal vez lo más importante para Kibernum, en el 223, es lograr crecer en sus otras líneas de negocios no relacionadas con staffing. Se trata de la unidad de Digital Factory y que básicamente tiene que ver con todos los procesos de entender de la gestión de aplicaciones asociado a los servicios de ingeniería de software. Y por otra parte, una escuela de entrenamiento digital que se llama IT AcademY.
