Tras 6 años de rumores, Apple por fin confirmó lo que era un secreto a voces: que tenía un producto, unas gafas más exactamente, para incursionar en el mercado de la realidad virtual y aumentada. Se trata del Apple Vision Pro, pero es más que eso, es un nuevo dispositivo de cómputo.
Comencemos con las malas noticias: el nuevo producto que Apple lanzará al mercado, las esperadísimas gafas de realidad aumentada llamadas Apple Vision Pro, tendrán un costo de 3.499 dólares y solo se liberarán hasta 2024 en Estados Unidos.
Ahora, retomemos. En medio de la conferencia anual de desarrolladores de Apple, el WWDC (WorldWide Developers Conference), se puso fin a una serie de rumores que venían desde 2017 y eran que este gigante estaba invirtiendo en la realidad aumentada y virtual con su propio dispositivo.
El producto revelado el 5 de junio se llama Apple Vision Pro y consiste en unas gafas sofisticadas y gruesas. Pero su tamaño es lo de menos cuando consideramos lo que pueden hacer. Se trata de un dispositivo de cómputo que se puede controlar con los ojos, la voz y las manos.
Conociendo la computación espacial
En términos sencillos, el Apple Vision Pro es un nuevo tipo de computadora disfrazada de gafas de realidad aumentada. Porque, no nos malinterpreten, estas gafas tendrán más poder de cómputo que muchos portátiles, al incluir el famoso chip M2 de Apple, utilizado en su última línea de Macbooks, junto con un nuevo procesador llamado R1.
Por cierto, el R1 se encargará del procesamiento de datos de entrada, es decir, de captar y procesar la información recogida por la cámara, los micrófonos, los sensores, etc., para crear una experiencia de uso más fluida.
Por supuesto, crear un nuevo dispositivo no depende solo del hardware. Por ello, también se ha creado un nuevo sistema operativo llamado VisionOS, que se encarga de integrar las aplicaciones del ecosistema Apple a este nuevo dispositivo.
¿Y esto qué significa? Significa que Apple está creando un dispositivo al que siente que la realidad aumentada y virtual se le queda pequeña, por lo que decidió llamarlo el primer computador espacial (spatial computer).
Aunque sabemos que a Apple le encanta inventar nombres para todo y patentarlos, como ha hecho con sus colores, el término de computación espacial se remonta a 2003 gracias a una tesis del MIT del entonces estudiante Simon Greenwold.
Por si les interesa, la definición dada por Greenwold de la computación espacial es: “La interacción humana con una máquina en la que esta retiene y manipula referencias a objetos y espacios reales”.
Apple Vision Pro: otros detalles
Volviendo al Apple Vision Pro y considerando la obsesión de Apple con el diseño (que muchos agradecen), el sistema de baterías que alimenta el poder de cómputo de esta máquina viene separado de su cuerpo principal y se conecta a través de un cable.
Los controles de las gafas son bastante intuitivos y cuentan con un control para ajustar el nivel de transparencia de las gafas, de modo que sea posible aislarse completamente del entorno (como en la realidad virtual) o que sean lo suficientemente translúcidas para interactuar con otras personas.
Por ello, las Apple Vision Pro pueden convertir cualquier habitación en una sala de cine, ya que son capaces de crear la sensación de pantallas de 100 pulgadas que se superponen al espacio. Claro está, también se pueden utilizar para trabajar en la oficina o para realizar videoconferencias si uno está lejos de ella.
Las gafas también son compatibles con los productos inalámbricos del ecosistema de Apple, como los AirPods, el Magic Keyboard, el Trackpad, etc.
Aunque quedan muchas incógnitas en el aire, lo más importante es saber si Apple logrará lo que otros aún no han podido: convertir esta tecnología (AR/VR) en un negocio exitoso, tal como lo han intentado Meta y Microsoft, entre otros. ¿Usted qué piensa?