Con titulares cada vez más frecuentes sobre los devastadores efectos del cambio climático y la situación del medio ambiente en el mundo, el deseo de contribuir ‘de alguna manera’ a controlar esta situación es cada vez mayor.
Por esto, cada vez más personas buscan alternativas para disminuir su huella de carbono, ya sea a través de prácticas de autogestión o por medio de terceros. Es decir, empiezan a reemplazar hábitos y productos tradicionales por algunos más amigables con el medio ambiente. Los emprendimientos sostenible llegan, entonces, como una valiosa alternativa.
[su_note note_color=”#4479B8″ text_color=”#333333″ radius=”3″ class=””]Lea también: Los argumentos (errados) más comunes para desvirtuar el cambio climático.[/su_note]
Aquí confluyen dos escenarios importantes: por un lado, la estrategia actual de economía circular, que fomenta las 9R: repensar, reutilizar, reparar, restaurar, remanufacturar, reducir, reproponer, reciclar y recuperar; y por otro, el potencial de emprendimiento en Colombia.
Según el Global Entrepreneurship Monitor 2018-2019 (Monitor global de emprendimiento), uno de los países con más proyecciones de crecimiento es Colombia. Además, es uno de los países de la región donde el emprendimiendo goza de gran reputación y es visto como una buena elección. Sin embargo, también dice el citado documento que una de las principales razones por las que se descontinúan estos emprendimientos es por problemas financieros o porque no son rentables.
[su_note note_color=”#498DC9″ text_color=”#333333″ radius=”3″ class=””]En este índice de contexto nacional de emprendimiento (Neci, por sus siglas en inglés), Colombia ocupa el puesto 32 (de 54). Consulte aquí el documento completo.[/su_note]
Según la Oficina de Negocios Verdes y Sostenibles del Ministerio de Medio Ambiente, y como registró el medio Portafolio, en Colombia existen más de 1.400 negocios de este tipo, los cuales generan más de 21.000 empleos.
Aquí reunimos algunos emprendimientos sostenibles colombianos, que pueden ser útiles para diferentes necesidades:
[su_box title=”Negocios Verdes” style=”default” box_color=”#EC7063″ title_color=”#FFFFFF” radius=”3″ class=””]
De acuerdo con la definición oficial del Ministerio de Ambiente, los negocios verdes incluyen actividades económicas en las que se ofertan bienes o servicios, que generan impactos ambientales positivos y que incorporan buenas prácticas ambientales, sociales y económicas con enfoque de ciclo de vida, que contribuyen a la conservación del ambiente. Se clasifican en 3: Bienes y servicios sostenibles provenientes de los recursos naturales; Ecoproductos industriales, y Mercados de carbono.
En la concepción estratégica del Plan Nacional de Negocios Verdes de Colombia se contempla como visión para 2025 que los Negocios Verdes estarán posicionados y consolidados como un nuevo renglón estratégico de impacto en la economía nacional.[/su_box]
Empaques (no más plástico)
Aunque los establecimientos comerciales entregan cada vez menos bolsas plásticas y cada día aparecen más iniciativas para desincentivar su uso, aún hay quiénes no saben cómo reemplazar estos productos. Una de las prácticas más comunes es usar el popular ‘carrito de mercado’ de las abuelas, o inclusos canastos para ir a mercar.
Sin embargo, hay emprendimientos que se dedican a fabricar sustitutos de bolsas plásticas, y de otros tipos de empaques.
- Compostpack: se centra en el desarrollo de bioplásticos (plásticos de fuentes renovables, biodegradables y compostables) usando como materia prima almidón de maíz. Esto ha resultado en la creación de Resinas CPK para la industria plástica y bolsas 100% compostables para diferentes usos. Detrás de este producto está el emprendedor bogotano Freddy Carrión.
- Terramarte: bolsas de algodón, bolsas reutilizables y mochilas son algunos de los productos que ofrece esta empresa colombiana con más de 10 años promoviendo el consumo sostenible.
- Natpacking: fabrica bolsas con almidón de yuca que se degradan en 180 días, como máximo. Sus bolsas no contienen ni polietileno ni derivados del petróleo. Este emprendimiento nació en Cali y es liderado por Jovany Pérez.
- Magnolia Envolturas: este emprendimiento sostenible nace como una alternativa ecológica, reutilizable, compostable y amigable con el planeta y con los alimentos; es una opción para reemplazar, por ejemplo, productos como el vinipel. Las envolturas son fabricadas con telas, aceites esenciales y cera de abejas de apiarios responsables de Córdoba, Vichada, Sincelejo y la Sabana de Bogotá. Es un producto 100% colombiano, creado por la diseñadora Juana González.
- Ecoplat: platos, vasos, cubiertos y pitillos desechables que no contaminan en ninguna etapa del proceso. Son una opción para eliminar el icopor y los desechables plásticos. Los productos están hechos de hojas caídas naturalmente, que se limpian, se tratan con vapor, se presionan en forma y se envasan.
- Lifepack: tal vez los hayan visto en la primera temporada de Shark Tank Colombia. Se trata de un emprendimiento sostenible que fabrica platos desechables y germinables. Es decir, que también pueden ser plantados luego de utilizarse. Los emprendedores detrás de este producto son Claudia Barona y Andrés Benavides
Productos de higiene y cuidado personal
Aquí tenemos una selección para reemplazar los jabones, estropajos, cepillos de dientes, productos de higiene femenina, infantiles y otros de uso diario.
- La Tortuga y la liebre: es un gran mercado ecológico con una interesante variedad de productos. Hay aceites coporales, cepillos de dientes y también para el cabello, copitos de bambú y algodón, cremas dentales, faciales y corporales, desodorantes, mascarillas y demás. En general, allí se encuentran productos que no tienen químicos contaminantes ni para el cuerpo y ni para el medio ambiente.
- Biogar: jabón de manos, lavaloza y detergente son algunos de los productos que ofrece este emprendimiento sostenible. El 99% de los ingredientes que utiliza son derivados de plantas y minerales, y más del 99% se biodegradan en el agua en unos 28 días. Los pedidos se pueden hacer por Internet, ya que cuenta con diferentes pasarelas de pago como PayU y Pago Seguro, entre otras.
- Ecoleza: esta tienda de productos ecológicos se gestiona por pedidos a través de WhatsApp, y ofrece todo tipo de productos de aseo y cuidado personal. Está situada en Medellín, desde donde se hacen despachos a toda Colombia, y es el trabajo de la emprendedora Nathalia Villada.
- Selem: aquí se concentran en crear prendas para el periodo menstrual, como una alternativa ecológica para evitar el uso de toallas higiénicas o tampones tradicionales. Según datos publicados por UN Environment, “en promedio, las mujeres que usan toallas sanitarias generan 60 kilogramos de residuos de este artículo durante su vida, eso equivale a 100.000 toneladas de desechos al año”.
- FlowFem, Lifecup y Madre Selva son dos emprendimientos distintos, pero que ofrecen lo mismo: copas menstruales. Aunque el último tiene además productos similares, como toallas higiénicas ecológicas, esponjas marinas y ropa interior. Hay que anotar que en la mayoría de los casos las copas son fabricadas en el exterior pero comercializadas por marcas nacionales.
- Be-Slow: reune de todo un poco, entre cuidado personal, higiene femenina, hogar, para mamás y bebés, accesorios y kits de desperdicio. Este es una especie de market place que reúne a varios emprendimiendos colombianos de este tipo.
Tratamiento de basuras
Aunque se ha ido cambiando la cultura en relación con la basura, aún hay muchísimo por hacer.
- Botellas de amor: este es uno de esos emprendimintos sostenibles con responsabilidad social, y funciona con la ayuda de voluntarios. Lo que hacen es pedir a las personas y empresas que separen la basura, y que llenen botellas de plástico con esa basura (con otros productos plásticos como empaques), o como ellos lo llaman, que “llenen las botellas de amor“. Luego, esas botellas deben ser llevadas a un centro de acopio y sirven como material para crear viviendas, parques infantiles, mobiliario escolar e infantil.
- Más Compost, menos basura: creado en Bogotá, se encarga de entregar un balde a los suscritos, para que semanalmente depositen allí sus residuos orgánicos; luego los recogen y los convierten en abono. Al cabo de 3 semanas le entregan el compost a sus usuarios. Actualmente operan solo en Bogotá y sus clientes varían entre familias, edificios residenciales, restaurantes, hoteles, bancos y otras organizaciones. Recogen más de 1.800 kilos de residuos orgánicos a la semana.
- Bancalimentos: este es un emprendimiento sostenible y de impacto social que trabaja en la reducción de la pobreza e inequidad. Lo que hace es recibir los residuos sólidos y orgánicos, y a cambio los usuarios retiran alimentos y otros productos. Este es un proyecto que cuentan con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y actualmente funciona en Magdalena, La Guajira, Valle del Cauca, Cundinamarca y Bolívar. La emprendedora detrás de este proyecto es Olga Yaneth Bocarejo.
- Tapas para sanar y Tapitas por patitas: son dos iniciativas que se caracterizan por recolectar tapas de botellas para diferentes causas, como ayudar a los animales desprotegidos, ayudar a los niños enfermos con cáncer y a sus familias; en paralelo, a la creación de conciencia social sobre el medio ambiente.
Música
- Los Latin Latas: esta es una banda musical ‘hecha de chatarra’. Todos los instrumentos son fabricados de material reciclado, de hecho, inventan sus propios instrumentos.
Es más que un grupo musical, es una propuesta artística, lúdica y pedagógica para pasar del discurso a la acción. Además de sus presentaciones musicales (como la que que disfrutaron los asistentes a TEDxBogotá 2019), tienen la Casa Cultural Latin Latas, un espacio en el que se reunen personas, colectivos y organizaciones para dar talleres, charlas, vender productos, todos orientados hacia la sostenibilidad.
Este listado incluye solo 17 ejemplos que permiten tomar acciones desde casa, pero como se mencionó previamente son más de 1.400 negocios de este tipo en el país, que transforman todo tipo de entornos. A la hora de elegir, por ejemplo, sus vacaciones, pueden buscar opciones ecológicas, que se esmeren por reducir el impacto ambiental; o si se piensa en medios de transporte, la elección puede ser un método que no contamine. Los cambios se pueden hacer, al mismo tiempo que se promueven los emprendimientos sostenibles de Colombia.
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Foto principal: RitaE (Pixabay).
