Entre los muchos retos que enfrentan los CEO -o directivos empresariales de hoy-, la perspectiva es uno de los más complejos, pues ser capaz de interpretar el contexto global, detectar tendencias y tener visión de futuro no es un asunto sencillo.
Más aún en medio del inicio de la Cuarta Revolución Industrial, en la que la innovación, la automatización de procesos, la gran velocidad con la que viaja y se genera información y el alcance e impacto de las tecnologías emergentes, exigen al líder empresarial pensar, no en un paso hacia adelante, sino en muchos pasos más de cara al futuro, y de manera más rápida.
Este fenómeno ha desencadenado una serie de perfiles de los ejecutivos y líderes empresariales de hoy, según el informe ‘Liderazgo en la Cuarta Revolución de Industrial: caras del progreso’ que la empresa Deloitte presentó en 2019, y que se basa en la encuesta hecha a 2.042 ejecutivos globales entre junio y agosto del 2018.
Los encuestados representaron a 19 países de América, Asia y Europa, y provenían de los principales sectores de la industria. Además, todos fueron ejecutivos nivel-C, incluidos los CEO (Presientes), COO (
Directores Ejecutivos), CFO (Directores Financieros), CMO (Directores de Marketing), CIO (Directores de Información) y CTO (Directores de Tecnología).
Sobresalientes Sociales
Para muchas empresas nacidas en los albores de la industria.4.0, el impacto social se ha tejido a lo largo de sus organizaciones desde el primer día. Y ahora, aquellas más establecidas y con más años en el mercado están empezando a tomarse su impacto en la sociedad mucho más en serio, tienen un compromiso genuino por mejorar el mundo y creen que su impacto social juega un rol vital para alcanzar el éxito.
De hecho, es tal la importancia que les asignan, que la encuesta de Deloitte reveló que el impacto social es el factor empresarial de mayor importancia que utilizan los líderes para medir el éxito (34%) –superando el desempeño financiero (17%) y la satisfacción de los empleados (17%).
Los líderes además están integrando el impacto social en sus estrategias centrales, pues buscan generar nuevos flujos de ingresos mediante el desarrollo o transformación de productos o servicios con un fuerte componente social que aporte a la comunidad y ambientalmente responsables.
También exhiben un mayor rigor en la toma de decisiones, y una preferencia por buscar opiniones de grupos diversos e inclusivos de partes interesadas.
Además, mostraron una preocupación más profunda por el uso ético de las tecnologías de la Industria 4.0.
Los ‘decisores por Data’
Los ejecutivos están luchando para desarrollar estrategias eficaces en los rápidos y cambiante mercados actuales. Por ello, buscan aprovechar el potencial de crecimiento inherente en la Industria 4.0 para innovar y explorar nuevas perspectivas de negocio; esto implica no siempre dar en el blanco, y más de dos tercios (69%) creen que tienen permiso para fallar y aprender de sus errores en el camino.
Además, los líderes también afirman que demasiadas opciones tecnológicas pueden ser algo abrumador, así que actúan basados en un acercamiento a métodos e información. Así mismo, el 62% asegura estar preparado para liderar sus organizaciones en la capitalización de oportunidades vinculadas a la Industria 4.0.
De hecho, un poco más de dos tercios de los líderes de este perfil afirmaron firmemente que sus organizaciones tienen la intención de capacitar a sus empleados actuales para acceder a las habilidades requeridas para la Industria 4.0.
Los campeones del talento
Una enorme mayoría de ejecutivos consideran que están haciendo todo lo que pueden hacer para preparar sus fuerzas de trabajo para la Industria 4.0 y que pueden confiar solo en los sistemas actuales de educación para preparar y equipar a los trabajadores.
Muchos de los trabajos y de las habilidades requeridas para la Industria 4.0 cambiarán dramáticamente; y si bien puede ser muy temprano para decir cómo, o en qué grado, es necesario que los ejecutivos comiencen a impulsar estrategias que motiven a su fuerza de trabajo para prepararse.
Según los hallazgos del estudio, ya existen ejecutivos más proactivos en anticipar las exigencias de transformación digital que acogen la responsabilidad de entrenar a sus empleados para el trabajo del futuro (51% vs 41% de todos los otros encuestados), y más propensos a invertir en tecnologías para tomar la delantera frente a los competidores (42% vs., 32%).
Entre las tendencias en el marco de este panorama, las organizaciones, por ejemplo, ya empiezan a considerar que sus fuerzas de trabajo no solo serán empleados que están en sus balances generales, sino que tienen que incluir trabajadores independientes, trabajadores de la ‘economía Gig’ y ‘crowds’ (multitudes, trabajo colaborativo online).
Esos trabajadores que están en y fuera del balance general están siendo aumentados con máquinas y software. Juntas, esas tendencias resultarán en el rediseño de casi todos los trabajos, así como también en una nueva manera de pensar acerca de la planeación de la fuerza de trabajo y la naturaleza del trabajo. Esto requiere la adopción de un enfoque de administración del capital humano para Industria 4.0.
Los abanderados de la disrupción
El optimismo y la confianza los llevan a tomar un mayor enfoque asertivo y práctico. Estos líderes adoptan un enfoque más holístico para la toma de decisiones, que incluye procesos más claros que se basan en datos y obtienen aportes de diversas partes interesadas.
Entienden que la inversión en innovación es necesaria para el crecimiento; de hecho, destinan recursos en tecnología con un enfoque concentrado en renovar sus mercados. Estas decisiones han permitido que sus inversiones alcancen o superen los resultados esperados.
Se sienten mejor preparados para liderar en la era de la Industria 4.0 (45%) y están más confiados en que sus organizaciones puedan capitalizar las oportunidades asociadas esta transformación.
