El panorama de inversión en Colombia está cambiando. Con la reducción de las tasas de interés, los rendimientos de inversiones tradicionales como los CDT se han vuelto menos atractivos. En respuesta, los inversionistas colombianos están explorando opciones alternativas, entre las cuales el crowdfactoring ha ganado popularidad.
Este modelo, que combina crowdfunding (financiación colectiva) y factoring (venta de facturas), permite a los inversionistas comprar facturas por cobrar de empresas que necesitan liquidez.
Crowdfactoring: Qué es y cuáles ha sido su impacto en Colombia
El crowdfactoring es una forma de financiamiento colaborativo que permite a las empresas obtener liquidez inmediata vendiendo sus cuentas por cobrar a inversionistas a través de plataformas en línea.
Desde 2014, Mesfix ha sido pionera en este modelo en Colombia y ha sido uno de los primeros jugadores en Latinoamérica. Hoy, permite que cualquier persona invierta desde 500.000 pesos –hasta cientos de millones de pesos– en facturas de empresas, con una rentabilidad que actualmente oscila entre el 18 % y el 25% Efectivo Anual, en tiempos en los que los bancos entregan menos del 13 % en sus diferentes productos.
Por ejemplo, si una empresa necesita liquidez inmediata después de vender sus productos o servicios, pero sus clientes le pagan en un plazo de 30 a 60 días, puede optar por vender sus facturas o cuentas por cobrar a través de Mesfix, en su sitio web mesfix.com. En esta plataforma, cualquier persona puede adquirir una parte o la totalidad de estas facturas a cambio de una rentabilidad; así, en una factura de 100 millones de pesos, una sola persona podría invertir esa cantidad o, por ejemplo, 100 personas podrían invertir 1 millón de pesos cada una.
En Colombia, uno de los países latinoamericanos en los que este modelo ha prosperado, más de 6,700 inversionistas han generado ganancias superiores a 18.000 millones de pesos mediante la compra de facturas en Mesfix.
Este flujo de inversiones ha beneficiado a cerca de 1.700 empresas, que han logrado financiarse por más de 600.000 millones de pesos.
Felipe Tascón, cofundador y CEO de esta fintech, explica que “cada vez más colombianos de a pie buscan nuevas fuentes de ingreso y, por ello, optan por inversiones alternativas que no requieran una alta suma de dinero para iniciar y que ofrezcan un retorno atractivo a corto plazo. En Mesfix buscamos democratizar este tipo de inversiones, y cada persona elige la factura en la que quiere invertir, así como el monto”.
Diversificación y gestión de riesgos
El crowdfactoring, como la gran mayoría de los instrumentos de inversión, conlleva un riesgo y exige a los inversionistas que tomen decisiones informadas.
Sin embargo, una de las ventajas del crowdfactoring es la diversificación de ese riesgo: invertir en múltiples facturas y empresas permite a los inversionistas mitigar el riesgo asociado con la mora o incumplimiento de pago. Y para reducirlo aún más, Mesfix brinda información financiera detallada de las empresas y su historial de pago.
El crowdfactoring se perfila como una opción cada vez más atractiva en el contexto actual de inversiones en Latinoamérica más democratizadora porque permite bajos montos, y con una rentabilidad superior a la de las inversiones tradicionales, y se consolida como una gran alternativa de financiación y liquidez para las empresas.