Tal vez fue gracias a series como ‘The Bing Theory‘ o ‘Stranger Things‘ que algunas personas empezaron a conocer nombres de juegos de video y a reconocer la pasión que envuelve esta cultura. Sin embargo, aún hoy hay quienes miran con desaprobación a los deportes electrónicos (eSports), por no considerarlos algo ‘serio’ o incluso porque creen que es un tema de algunos pocos. ¡Qué alejados de la realidad!
Un negocio que crece
Así como la Champions League mueve cantidades de audiencia y dinero exorbitantes, poco a poco las ligas de deportes electrónicos también lo hacen. Tienen deportistas patrocinados como un Messi o un James, ligas locales, nacionales, regionales que conducen a las citas mundiales más emocionantes, que no solo involucran un gran montaje, sino una gran dedicación y entrenamiento.
Según reveló Business Insider, a finales de 2018 el valor del mercado de los deportes electrónicos era de aproximadamente $900 millones de dólares, una cifra que debería continuar aumentando a lo largo del año. La industria cuenta con patrocinio de marcas como Intel, Coca-Cola, Red Bull, T-Mobile y Audi, entre tantas otras marcas.
Los eSports transforman las dinámicas sociales
En abril de 2019 se realizó la Final Latinoamérica de la Liga League of Legends en Bogotá, en la que el equipo argentino Isurus Gaming se llevó el trofeo frente 6000 asistentes y 10 mil personas que vieron el evento en vivo. ¿Por qué tanta gente? Sucede que League of Legends (de Riot Games) es el deporte electrónico de PC con más de 100 millones de jugadores activos en el mundo, a este se le pueden sumar otros, por lo que la influencia e impacto de los eSports no deben pasarse por alto.
Misael Di Ciancia, entrenador del equipo campeón (Isurus) le comentó a Impacto TIC que uno de los mayores que hay que eliminar es el que un jugador de estas ligas es alguien que está todo el día encerrado en su casa jugando sin hablar con nadie y afectando su salud física.
Los equipos trabajamos día a día para demostrar que para tener éxito en este mundo es todo lo contrario, los jugadores trabajan constantemente habilidades tanto sociales como tener una rutina saludable para poder rendir a su 100% y lograr sus objetivos.
Misael Di Ciancia, entrenador Isurus
En ese mismo sentido hay que replantearse algunas aseveraciones aún comunes, como el que estos deportes no son ‘reales’ o ‘verdaderos’ porque no hay actividad física, o porque los deportistas no sudan. Entonces, vale la pena preguntarse, ¿qué pasa con el ajedrez?, o ¿han presenciado estas competencias en vivo?
La diversidad de jugadores es cada día mayor, en cuanto a género, nacionales y edades. Este último punto es especialmente importante, porque aunque los ‘gamers’ se asocian a jóvenes en realidad los padres están más involucrados de lo que se podrían imaginar. En su conferencia TED Daphne Bavelier, neurocientífica que aborda los efectos de los videojuegos en el cerebro, preguntaba, ¿quiénes son los que toman las consolas cuando los hijos se van a dormir? Por otro lado, los ‘gamers’ de primeras generaciones, ya no son adolescentes.
Creo que los deportes electrónicos nos están dando una oportunidad de poder llegarle a una generación nueva de personas donde podamos enseñar como trabajar en grupo, la responsabilidad de un trabajo, tenerlos en un ambiente sano y poder transmitir buenos valores. Al mismo tiempo nos está dando una oportunidad de unir a esta nueva generación con la anterior, padres que quieren lo mejor para sus hijos y antes estaban en contra, están empezando a apoyarlos porque entienden que esto puede ser una carrera y una vez que conocen este mundo dejan de lado los prejuicios y empiezan a integrarse.
Misael Di Ciancia, entrenador Isurus.
¿Qué hace un ‘gamer’ de alto rendimiento?
Un deportista de las grandes ligas es el resultado de años de trabajo y los deportes electrónicos no son la excepción. La rutina de un ‘gamer’ profesional varía de acuerdo a su equipo y su entrenador.
En el caso de Isurus tienen prácticas grupales (donde abarcan aspectos teóricos, tácticos, psicológicos), con tiempos de comida y descanso ajustados a una agenda. “Después de eso los jugadores tienen una actividad exterior al juego que suele variar entre acondicionamiento físico, actividades de coordinación de grupo, actividades con el psicólogo del equipo para trabajar distintos conceptos del grupo, entre otros”, comparte Di Ciancia.
A la hora de asumir un evento como la Final Latinoamérica de League of Legends el trabajo para controlar la ansiedad también se intensifica.
Tanto ‘gamers’ como entrenadores son conscientes de que hay que tener un buen rendimiento dentro y fuera del juego. En el caso de Isurus Gaming, el equipo cuenta con un director deportivo que se encarga de la alimentación, de que los jugadores respeten las horas de sueño, que hagan acondicionamiento físico y de que “haya un buen ambiente en la casa. Es hacerle entender a los jugadores que tener buenos hábitos de vida es algo que influye positivamente en los resultados futuros del equipo y propios”.
Aunque aún falta mayor reconocimiento a esta industria, y al impacto que genera en las relaciones sociales, la educación y los negocios, se avanza a pasos de gigantes.
Aquí compartimos algunos de los hitos de la industria de los eSports en el mundo:
Foto:pulpON!