SOSTENIBILIDAD

Tecnología para la gestión del agua: Casos de éxito y tendencias



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La agricultura consume el 70 % del agua dulce global, y Colombia triplica el promedio de extracción per cápita de la OCDE. Este artículo revela cómo la tecnología, desde gemelos digitales y la IA hasta plataformas como Agrometer, es vital para transformar la gestión del agua, reducir pérdidas y garantizar la sostenibilidad hídrica.

Publicado el 4 de ago de 2025

Sandra Defelipe Díaz

Periodista especializada en tecnología, en medios digitales, producción de contenidos y liderazgo editorial



Tecnología para la gestión del agua

La crisis global del agua, intensificada por el cambio climático y el crecimiento demográfico, exige una transformación urgente en la gestión de este recurso vital. La tecnología emerge como un pilar fundamental para abordar este desafío, especialmente en América Latina y países como Colombia, donde el consumo de agua per cápita supera con creces el promedio mundial.

La agricultura: el mayor consumidor de agua dulce y un campo fértil para la innovación

A nivel global, la agricultura es el sector que más agua dulce consume, acaparando aproximadamente el 70 % de las extracciones mundiales. Esta cifra, ampliamente respaldada por organizaciones como la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), subraya el inmenso potencial de ahorro y eficiencia que la digitalización puede aportar a este sector. A esto se suma que casi la mitad de la población mundial se enfrenta a la escasez de agua y se prevé un 40% de escasez de agua dulce para 2030 y que alrededor del 30% del agua potable se pierde en el proceso de distribución, según el Foro Económico Mundial.

La huella hídrica agrícola se compone principalmente de agua verde (agua de lluvia), que representa el 72 % del total, seguida del agua azul (superficial o subterránea) con un 15 % y el agua gris (agua contaminada) con un 13 %.

En Colombia, la situación es particularmente crítica. Según datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), Colombia lidera el ranking de extracción de agua con un consumo anual per cápita de 1.988 metros cúbicos, casi tres veces el promedio de los países miembros de la Ocde (738 metros cúbicos). En 2020, la demanda nacional de agua en Colombia se distribuyó en un 43.25% para actividades agrícolas y poscosecha, mientras que el resto se destinó a usos no agrícolas como la energía hidroeléctrica, el consumo doméstico, la ganadería y la industria. Esta alta dependencia del agua en el sector agrícola colombiano, donde la mayoría de los cultivos se riegan con agua de lluvia en zonas de altas precipitaciones, no exime la necesidad de una gestión más eficiente para evitar la competencia por recursos hídricos con ecosistemas y otras actividades productivas.

El estudio ‘Estado del arte de la huella hídrica agrícola en Colombia‘, realizado por Andrés Felipe Góngora Duarte y Juan Manuel Trujillo González, publicado en la revista Ingeniería y Competitividad,  2025, arroja luz sobre el uso del agua en la agricultura colombiana. Los principales hallazgos de este estudio indican que, en promedio, el 72 % del agua utilizada en la agricultura colombiana corresponde al componente verde (agua de lluvia), el 15 % al azul y el 13 % al gris. Esta alta dependencia del agua de lluvia en la agricultura nacional es un punto clave.

Los cultivos más estudiados en el contexto de la huella hídrica en Colombia, según Góngora y Trujillo, son las hortalizas (20 %), café y cacao (19 %), frutales (17 %), flores (12 %) y cereales (10 %). Los autores señalan que, si bien la huella hídrica verde no implica una competencia directa por el consumo de agua, sí genera competencia por el uso del suelo a medida que la frontera agrícola nacional se expande.

Desafíos y la promesa de la digitalización en el sector hídrico latinoamericano

Las empresas del sector del agua en América Latina se enfrentan a desafíos complejos que van desde el crecimiento acelerado de la población urbana y el cambio climático, hasta infraestructuras obsoletas y pérdidas significativas de agua potable en las redes de distribución. El Banco Mundial estima que en algunos países de la región se pierde hasta el 50 % del agua potable en las redes de distribución, una cifra muy por encima del promedio global. Además, la mayoría de las redes de acueducto y alcantarillado están envejecidas y cuentan con sistemas de medición poco confiables o inexistentes.

Frente a este panorama, la inversión en tecnología no es solo una tendencia, sino una necesidad operativa y financiera. Jesús Sánchez, CMO de Open Intelligence, destaca que: “Las soluciones digitales no solo permiten asegurar un suministro resiliente y eficiente, sino que también permiten incluir a los clientes finales en el ciclo del agua y apoyar estrategias de uso razonable del servicio”.

Tecnología como habilitador y transformador para la gestión del recurso hídrico

En el ámbito agrícola, empresas colombianas como Controles Empresariales están desarrollando soluciones innovadoras. Su tecnología Agrometer digitaliza el riego en cultivos industriales, permitiendo tomar decisiones basadas en datos en tiempo real, incluso en zonas sin cobertura móvil, gracias a una red propia de telecomunicaciones.

Agrometer monitorea variables clave como el nivel freático, la humedad del suelo y la cantidad de lluvia mediante sensores autónomos con paneles solares, transmitiendo la información a la nube para su análisis en tableros interactivos. Enrique Medina, líder de ciberseguridad de Controles Empresariales, enfatiza la importancia de la certeza en la toma de decisiones: “Lo que buscamos con Agrometer es que el tomador de decisiones no tenga que depender de estimaciones ni esperar días para entender qué está pasando en el suelo. La información tiene que estar lista cuando se necesita”.

Hoy, Agrometer Opera en más de 400 hectáreas de palma africana en Casanare, donde permite tomar decisiones de riego basadas en datos en tiempo real, incluso en zonas sin cobertura móvil, gracias a una red propia de telecomunicaciones. Para garantizar la transmisión de datos desde zonas apartadas, Controles Empresariales implementa una red de telecomunicaciones propia basada en tecnología LoRaWAN, la misma que se usa para soluciones IoT de bajo consumo energético y largo alcance. Esto permite que incluso los cultivos más remotos puedan contar con un sistema de monitoreo digital, sin depender de infraestructura externa. 

Los beneficios de Agrometer incluyen un uso más eficiente del agua y los fertilizantes, la reducción de pérdidas por enfermedades asociadas al exceso de humedad y la optimización de la planificación de tareas agrícolas.

También se pueden encontrar soluciones en otros sectores más allá de la agricultura. Un ejemplo es Smartflex, una plataforma para empresas de servicios públicos, demuestran cómo la tecnología puede transformar la gestión del agua. Al combinar un Sistema de Información al Cliente (CIS) con módulos de Gestión de Datos de Medición (MDM), Gestión Móvil de la Fuerza Laboral (MWM) y un portal de autoservicio, Smartflex permite una mejora sustancial en la eficiencia operativa y en la relación con el cliente.

Entre los beneficios clave de invertir en estas soluciones tecnológicas se encuentran:

  • Gestión de cobros sobre agua no contabilizada: La implementación de medidores inteligentes de agua, soportados por Smartflex, permite la lectura remota y precisa del consumo en tiempo real. Esto facilita la detección temprana de consumos atípicos, mejora la exactitud en la facturación y promueve un uso más eficiente del recurso hídrico, abordando el crítico problema del agua no contabilizada por fugas, fraudes o errores de medición.
  • Adaptación ágil a marcos regulatorios: La arquitectura moderna de Smartflex permite que las empresas de servicios públicos se adapten fácilmente a los cambios normativos, como la reutilización de aguas grises y la reducción de pérdidas, sin necesidad de complejos desarrollos de software.

Tendencias tecnológicas clave para la gestión del agua

Una de las tendencias tecnológicas más prometedoras en la gestión del agua son los gemelos digitales. Estas representaciones virtuales de objetos o sistemas físicos permiten simular diversos escenarios y condiciones, facilitando la toma de decisiones estratégicas basadas en datos precisos en tiempo real, sin la necesidad de costosas pruebas físicas. Los gemelos digitales pueden reducir el tiempo de mantenimiento hasta en un 30 % y los costos de mantenimiento hasta en un 25 %. La Compañía de Agua de Lushan en China, por ejemplo, utilizó un gemelo digital para optimizar su red, logrando una reducción significativa en la pérdida de agua

El reporte ‘Water Technology Trends 2025. Revolucionando la gestión hídrica gracias a la digitalización‘, identifica ocho tendencias tecnológicas clave que marcan la gestión del agua para 2025:

  1. Incremento del uso de la Inteligencia Artificial e inteligencia operativa: La IA optimiza operaciones con algoritmos predictivos, mejorando la sostenibilidad y el servicio.
  2. Ciberseguridad en infraestructuras críticas: Es esencial fortalecer la ciberseguridad en el sector del agua debido al aumento de amenazas digitales.
  3. Soluciones digitales para el control de pérdidas de agua (agua no registrada): Se esperan innovaciones en análisis de datos en tiempo real y gestión de sectores, utilizando tecnologías como IA, IoT, gemelos digitales y sensores mejorados.
  4. Tendencias emergentes en las plantas de tratamiento de aguas residuales (EDAR): La digitalización transformará las EDAR en instalaciones inteligentes y sostenibles.
  5. Importancia de la digitalización en la gestión de las inundaciones: Los Sistemas de Ayuda a la Decisión (SAD) y los Sistemas de Alerta Temprana (SAT) son herramientas esenciales para enfrentar eventos extremos.
  6. Riego inteligente y la digitalización como impulsores del futuro agrario y urbano: Tecnologías como la telelectura, automatización, monitorización en tiempo real y teledetección serán pilares para la eficiencia hídrica y energética.
  7. Innovaciones implementadas en edificios inteligentes y Redes DHC (District Heating and Cooling): Impulsadas por plataformas digitales, serán clave para la sostenibilidad urbana, optimizando recursos.
  8. Optimización de la gestión de los recursos hídricos y mejora de la calidad de los servicios: Es fundamental transformar la calidad de los servicios de agua mediante aplicaciones como IA, aprendizaje automático y control remoto de la infraestructura.

Un futuro más resiliente y sostenible

El estudio de Góngora y Trujillo concluye que la agricultura en Colombia necesita la implementación de políticas que enfaticen el uso sostenible del agua, buscando un equilibrio entre las necesidades de producción y la conservación de los recursos ambientales. Recomiendan el uso de tecnologías eficientes que prioricen la fuente de agua verde (lluvia), en línea con el ODS 12 (Producción y Consumo Sostenibles). Además, señalan que evaluar la huella hídrica contribuye a reducir la contaminación por fertilizantes y a preservar la calidad del agua, lo que se alinea con el ODS 6 (Agua Limpia y Saneamiento).

La Transformación Digital del sector hídrico en América Latina, impulsada por soluciones como Agrometer, junto con el avance en el uso de gemelos digitales e Inteligencia Artificial, representa una oportunidad estratégica para modernizar la gestión del agua. No se trata solo de optimizar el uso del recurso, sino de integrar al cliente como un actor fundamental en el ciclo del agua, mejorar la relación con los usuarios y cumplir con normativas cada vez más exigentes. Aquellas empresas que apuesten por esta modernización tecnológica no solo fortalecerán su competitividad, sino que construirán un modelo de gestión más resiliente, eficiente y sostenible, preparado para los desafíos del futuro.

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