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Más de la mitad de los 103 millones de líneas móviles en Colombia están inactivas



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La brecha en las cifras distorsiona las métricas de los informes que se trabajan sobre el sector. Sobreestimar la cantidad de usuarios impacta estrategias empresariales y políticas públicas: es necesaria una depuración.

Publicado el 14 de abr de 2025



Más de la mitad de los 103 millones de líneas móviles en Colombia están inactivas
Más de la mitad de los 103 millones de líneas móviles en Colombia están inactivas

En Colombia, el sector móvil cerró el año pasado con 102,9 millones de líneas, 6,4 % más que en el mismo periodo de 2023, un número histórico, de acuerdo con el más reciente Data Flash de la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC), pero que no es un parámetro real. Más de la mitad de esas líneas (54,4 %) no generaron ingresos durante el último trimestre del año. En otras palabras, la mayoría de los accesos son técnicamente ‘activos’, pero económicamente ‘pasivos’.

Esto se explica por una abundancia de líneas prepago ociosas por medio de las que no se compran paquetes ni consumen servicios a demanda. Lo que lleva a plantear si es hora de actualizar las métricas que se usan hace décadas para hablar de penetración y cobertura del servicio móvil.

La enorme brecha entre líneas móviles activas e inactivas distorsiona las métricas de los informes que se trabajan sobre el sector, que sirven como insumo para desarrollar tanto estrategias empresariales como políticas públicas, lo que probablemente tiene implicaciones financieras y regulatorias para la industria.

Por ejemplo, al sobrestimar la cantidad de usuarios, un operador puede creer que ya no hay margen de expansión en una zona geográfica, lo que frena inversiones en nuevos servicios, tecnologías o campañas de fidelización. Esto es crítico en un contexto de migración hacia 5G, donde se requiere una base mínima de usuarios reales para justificar el despliegue.

Por otro lado, si bien estas empresas cuentan con herramientas tecnológicas muy precisas para medir y administrar en tiempo real el tráfico de sus redes en distintas áreas, con datos inflados, puede suceder que los operadores crean que el mercado está cubierto y decidan no invertir más en ese lugar, cuando en realidad muchas de esas líneas podrían estar inactivas. Esto deja grupos de población sin atención, que por lo general son sectores rurales o de bajos ingresos.

En materia de políticas públicas, si los datos reflejan una cobertura móvil mayor a la real, podría producirse una asignación inadecuada o la postergación de subsidios e inversiones en conectividad social, debido a la falsa percepción de que esas zonas ya están debidamente atendidas.

Incluso, las metas de cobertura impuestas en contratos como el de 5G pueden estar sobreestimadas.

​¿Cómo se maneja hoy este tema? Según la Resolución 5050 de 2016 de la CRC, la ‘pérdida de número en prepago’ se produce “si durante un periodo de 2 meses, el usuario no realiza ni recibe llamadas, o no cursa tráfico de datos, o no envía ni recibe SMS, así como tampoco hace recargas, ni tiene saldos vigentes; el operador podrá disponer del número de su línea telefónica, para lo cual este debe darle aviso al usuario con 15 días hábiles de antelación”.

Como se aprecia hay muy poca claridad sobre este tema, primero porque no se establece explícitamente que los operadores deban depurar periódicamente sus bases de datos; además, la resolución determina que “el operador podrá disponer del número de la línea telefónica”, es decir que no lo obliga, y para hacerlo, tiene que comunicarse con el cliente que, precisamente, no está usando el celular.

Con la pelota en su cancha, ¿será que la dinámica competitiva ha impedido una depuración real de las bases de usuarios? Tal vez los operadores no se atreven a hacerlo por temor a proyectar una imagen de debilidad frente a sus competidores, especialmente si no lo hacen todos al mismo tiempo. De hecho, en los últimos años, el único que emprendió una depuración significativa fue Movistar, según lo explicó  en informes financieros pasados.

No depurar las líneas inactivas infla la realidad y crea una percepción de madurez o saturación del mercado que no refleja las condiciones reales de competencia. En un sector como el de las telecomunicaciones, donde la información guía decisiones multimillonarias, la precisión es una necesidad estructural.

India lo hizo en 2011 y eliminó 250 millones de líneas ociosas, que en ese momento eran el 30 % del mercado, esto les permitió hacer una recalibración de las estrategias de crecimiento enfocadas en áreas rurales. algo parecido a lo que necesita el país

Nos dicen que Colombia está hiperconectada por medio de celulares, pero no todos los accesos cuentan. El verdadero reto para los operadores ya no es sumar más líneas –eso ya no es noticia–, sino lograr que esas líneas hablen, naveguen y paguen.

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