¿Sabía usted que las tiendas de barrio de Colombia generan más de 575.000 empleos? Las cifras proporcionadas por la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) resaltan hasta qué punto estas empresas son importantes en Colombia; sin embargo, su índice de digitalización no es el mejor.
Esta situación es aún más importante cuando consideramos que, según Kantar, las tiendas de barrio son visitadas al menos cada 4 días por una familia en Colombia. Cifras como estas han llevado al desarrollo de distintas soluciones tecnológicas que incluyen emprendimientos de comercio electrónico como Chiper y Super vecino, entre otros.
Sin embargo, existen retos adicionales. Para complicar aún más las cosas, la pandemia generó cambios en la dinámica de uso de algunos hogares, impulsando sus canales digitales, además del crecimiento de los supermercados de bajo costo. Según el DANE, las ventas del comercio minorista han disminuido un 6,6 % en 2023.
Según Fenalco, situaciones como esta han llevado al 82 % de los tenderos a reducir sus ganancias para mantenerse competitivos, y es que la tecnología no solo optimiza los procesos de compra y venta, sino que también mejora la experiencia de los clientes. Una veta aún por explotar en las tiendas de barrio de Colombia.
El papel de la tecnología
Martín Malievac, Director de Investigación y Desarrollo de Napse, afirma que “la evolución del retail local se ha convertido en una prioridad, ya que los consumidores buscan cada vez más velocidad, practicidad y conveniencia en sus experiencias de compra”. Porque la misma tecnología ofrece beneficios en áreas como:
- Optimización de procesos y adaptabilidad a las tendencias
- Fidelización del cliente y flexibilidad en ofertas
- Experiencia de compra
- Diversificación de canales y cercanía con los consumidores
Optimización de procesos y adaptabilidad a las tendencias: La implementación de sistemas tecnológicos agiliza las operaciones diarias, optimiza el manejo de inventarios, permite control preciso de los productos disponibles, evita pérdidas y perfecciona la reposición de mercancía. Además, la gestión de transacciones permite una eficiencia operativa notable. De igual manera, pueden adaptarse fácilmente a las tendencias emergentes, ya sea a través de servicios en línea, pedidos por aplicación o promociones personalizadas.
Fidelización del cliente y flexibilidad en ofertas: Herramientas como programas de lealtad y sistemas de seguimiento de preferencias permiten a los comercios locales construir relaciones más sólidas con sus clientes y fomentar la recompra. Gracias a su cercanía directa con los consumidores, pueden adaptar ofertas y descuentos para satisfacer las demandas específicas de la gente y recompensar a los clientes habituales.
Experiencia de compra: Debido a la proximidad geográfica de estos comercios, a su acceso rápido y a la eliminación de largos desplazamientos, sus clientes ahorran tiempo y esfuerzo. A esta práctica se le suma la variedad de productos esenciales y adaptados a las necesidades de la comunidad local. Así, la tecnología podría fortalecer su impacto gracias a sistemas de pago modernos y pedidos en línea que generan una experiencia más rápida y adaptada a las expectativas de los consumidores.
Diversificación de canales y cercanía con los consumidores: Es importante ampliar los canales de venta; por lo tanto, la presencia en plataformas digitales y redes sociales amplía la visibilidad atrayendo a nuevos clientes y manteniendo una conexión constante. El hecho de ya contar con una atención personalizada por su tamaño y naturaleza local facilita la retroalimentación directa para hacer ajustes rápidos y mejoras en el servicio.
